Recortes de Prensa Martes 9 Julio 2024

Ataques ucranianos dejan cuatro muertos en la zona fronteriza rusa de Bélgorod

Carlos Garcés. Madrid. el mundo. 9 Julio 2024


Al cumplirse 867 días de la guerra en Ucrania, Kiev ha respondido al ataque indiscriminado que Rusia llevó a cabo este lunes contra varios territorios ucranianos, en el que murieron al menos 37 personas y más de 150 fueron heridas. Esta madrugada, Ucrania ha atacado la zona fronteriza rusa de Bélgorod dejando al menos cuatro muertos.


Los sistemas de defensa aérea de Rusia destruyeron además 38 drones que Ucrania lanzó durante la noche, incluidos 21 sobre la región sur de Rostov y siete sobre Kursk, ambas zonas fronterizas con Ucrania, dijo el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado. Dos subestaciones eléctricas y un depósito de petróleo se incendiaron tras el ataque.


9.11

Rusia denuncia un ataque masivo ucraniano con drones contra cinco de sus regiones

Rusia denunció este martes un ataque masivo ucraniano con drones contra cinco regiones del sur y el centro del país, informa Efe.


Según el Ministerio de Defensa de Rusia, que hasta el momento no ha informado de víctimas, los sistemas de defensa antiaérea derribaron anoche un total de 38 drones ucranianos de ala fija.


El parte castrense precisó que los drones enemigos fueron derribados en la regiones de Bélgorod (3), Kursk (7), Voronezh (2), Rostov (21) y Ástrajan (5).


8:31

Ucrania confirma la muerte de 4 niños en el ataque ruso del lunes contra Kiev

La Administración Militar de la capital ucraniana confirmó este martes la muerte de cuatro niños en el ataque ruso contra Kiev del lunes, que destruyó parcialmente un hospital infantil del distrito de Shevchenko obligando evacuar a los pacientes, informa Efe.


"Entre los muertos hay cuatro niños", escribió en Telegram el jefe de la Administración Militar capitalina, Serguí Popko. Un total de 27 personas, incluidos los cuatro menores, perdieron la vida como consecuencia de la caída de los misiles rusos en la ciudad, que hirieron a 117 civiles. Dos trabajadores adultos del hospital murieron en el ataque.


8:11

México condena el ataque con misiles a un hospital infantil de Ucrania

El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE, Cancillería), condenó y reprobó este lunes el ataque con misiles perpetrado por Rusia contra varios objetivos en Ucrania, entre ellos el hospital infantil Ojmatdit de Kiev, en una jornada que se saldó con 37 muertos y 170 heridos, informa Efe.


"El Gobierno de México condena el ataque al hospital infantil Okhmatdyt, en Kyiv, Ucrania", apuntó la Cancillería mexicana en un comunicado.


"México reprueba cualquier tipo de ataque en contra de objetivos civiles y exige el apego estricto a los códigos de conducta establecidos en el derecho internacional humanitario", añadió.


7:40

Los aeropuertos rusos de Astracán y Volgogrado restringen los vuelos tras el ataque ucraniano con drones

Los aeropuertos rusos de Astracán y Volgogrado restringieron los vuelos el martes después de un ataque con aviones no tripulados ucranianos, informaron agencias de noticias rusas, informa Reuters.


Los sistemas de defensa aérea de Rusia destruyeron 38 drones que Ucrania lanzó durante la noche en varias regiones rusas, dijo anteriormente el Ministerio de Defensa de Rusia.


7:20

El canciller chino dice a su par bielorruso que es prioritario "evitar una escalada" en Ucrania

El ministro de Asuntos Exteriores de China, Wang Yi, mantuvo el lunes una reunión en Pekín con su homólogo bielorruso, Maksim Ryzhenkov, en la que declaró que la "prioridad inmediata" en Ucrania es "evitar una escalada" del conflicto y "crear las condiciones para reanudar el diálogo", informa Efe.


El canciller chino enfatizó además la importancia de que la guerra no "se expanda" a otros territorios y de que no se produzcan "incitaciones por parte de terceros".


"China continuará desempeñando un papel constructivo en la búsqueda de soluciones", aseguró Wang, informó en la noche local del lunes un comunicado publicado en la página web de la Cancillería china.


7:00

Japón considera injustificable el ataque de Rusia contra un hospital infantil ucraniano

Japón condenó este martes el ataque perpetrado por Rusia contra el Hospital Pediátrico Ojmatdit de Kiev en el marco de una ofensiva multiobjetivo que ha dejado al menos 37 muertos, y expresó que este tipo de actos son injustificables, informa Efe.


"Japón considera graves las consecuencias que el ataque de Rusia ha causado entre los ciudadanos de Ucrania. Este tipo de ataques no se pueden justificar de ninguna forma", dijo hoy el portavoz gubernamental japonés, Yoshimasa Hayashi, en una rueda de prensa.


Hayashi urgió además a tomar "medidas contundentes" ante tal acto e instó a la cooperación por parte de los países del G7 (Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) y la comunidad internacional para que cese la invasión rusa de Ucrania.


GUERRA EN EUROPA

Terror ruso sobre Kiev: Putin lanza 40 misiles, causa más de 20 muertos y bombardea un hospital materno infantil

Alberto Rojas. el mundo. 9 Julio 2024


Cientos de voluntarios hacen cadenas humanas para buscar víctimas bajo los escombros; de momento hay más de 20 muertos y varios heridos críticos


La Rusia de Putin ha vuelto a contraprogramarse a sí misma. Mientras que sus aliados y tentáculos propagandísticos hablaban de diálogo y paz, sus terminales militares imponen el terror en las ciudades ucranianas. Es el manual clásico de negociación del régimen, como advirtió la primera ministra estonia, Kaja Kallas, cuya familia fue víctima del estalinismo. Primero, imponer condiciones de máximos aunque parezcan imposibles de cumplir. Segundo, usar un ultimátum. Después, amenazar e intimidar.


Moscú ha atacado este lunes Ucrania con más de 40 misiles de varios tipos, incluyendo de crucero y balísticos, los temibles Kinzhal causando más de 20 muertos hasta el momento. El uso masivo de estos terrores tecnológicos tiene una razón: así se saturan las defensas antiaéreas y es mucho más difícil derribarlos por la sincronía con la que irrumpen sobre las ciudades. Varios barrios céntricos de la capital sufrieron daños. A lo lejos, Kiev presentaba un aspecto desolador, con múltiples columnas de humo negro en su horizonte. Los kievitas bajaron de nuevo a los sótanos y al metro, el refugio más seguro, igual que hacían los londinenses ante los bombardeos nazis.


Los blancos perseguidos están en el centro de la ciudad y eran civiles. Al Kremlin hace tiempo que se le acumulan los crímenes de guerra pero sigue actuando con su clásica impunidad, a la luz del día y contra una ciudad llena de cámaras y fotógrafos extranjeros. El objetivo sigue siendo aterrorizar a la población ucraniana e imponer costes inasumibles a su Gobierno por la resistencia mostrada hasta ahora contra la invasión rusa.


El mejor ejemplo es el ataque al hospital materno infantil de Okhmatdyt con un misil balístico, lo más preciso de su arsenal. Se trata de una localización bien conocida por Rusia. Si un proyectil de esa magnitud y tecnología cae sobre ese centro resulta muy difícil pensar que se deba a un error. A esta hora cientos de voluntarios ayudan haciendo cadenas humanas para despejar de cascotes todas las zonas afectadas en busca de supervivientes.


Durante toda la mañana han caído en ráfagas varios misiles sobre otras zonas. Algunos eran proyectiles enteros y otros, meros restos de la intercepción por parte de las baterías Patriot, las únicas capaces de derribar este tipo de terrores tecnológicos. De la destrucción que han dejado los proyectiles y los restos es responsable Rusia, cuyo nulo respeto por las ciudades y por los civiles ucranianos ha quedado acreditado y documentado en dos años y medio de invasión.


Este ataque llega tras los resultados de las elecciones francesas y la decepción de la candidatura preferida por el Kremlin, que no es otra que Marine Le Pen, si se tienen en cuenta las llamadas a votar a esta formación por parte de perfiles oficiales del régimen ruso en las redes sociales durante los últimos días. La pasada semana, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, el gran aliado de Putin en la UE y la OTAN, se presentó en Moscú enviado por sí mismo para, según él, intentar una paz negociada. Este lunes, Putin ha vuelto a dejar claro que no desea la paz, sino la victoria al precio que sea.


Sorpresa, caos y rabia en el hospital infantil de Kyiv bombardeado por Rusia: “Estábamos seguros de que no atacarían aquí”

Los supervivientes relataron las escenas de terror que vivieron tras el ataque ruso contra uno de los mayores centros de salud pediátricos de Ucrania: “¿Por qué estos niños?”, reclaman

SILVIA JIMÉNEZ. la razon. 9 Julio 2024


Retirando ladrillos y escombros a mano, miles de personas acudieron este lunes al lugar del devastador ataque de Rusia contra un hospital infantil en Kyiv, tras un bombardeo masivo que mató a más de 30 personas en todo el país. Poco después de que los supervivientes del ataque salieran del búnker del sótano del hospital infantil Okhmatdyt, la multitud se congregó para formar una cadena humana y retirar los escombros pieza a pieza.


Residentes, equipos de rescate, personal militar y médicos con batas cubiertas de sangre ayudaron a retirar los escombros del hospital destruido, después de que se informara de que había personas atrapadas bajo los escombros. Amplias zonas del hospital quedaron devastadas por el ataque, que según las autoridades ucranianas fue causado por un misil de crucero ruso.


Dos bloques de hospitales cercanos también resultaron gravemente dañados por la explosión, con la mayoría de las ventanas reventadas y sangre esparcida por sus paredes. Mientras los misiles caían sobre Kiev, Pavlo Holoviy corrió hacia el hospital infantil donde su hijo se recuperaba de una operación reciente. Cuando llegó, todavía salía humo de los escombros.


El hombre de 37 años dijo que era “imposible expresar” sus emociones tras encontrar a su mujer y a su hijo a salvo. “Sinceramente, lo principal era ver a mi mujer y a mi hijo, no presté atención al resto”, dijo Holoviy.


“Mi hijo Sasha estaba en la sección de traumatología. Hubo una explosión y tuvimos que salir muy rápido. Había muchos niños heridos bajo los escombros”, dijo a Efe Natalia Sheyan mientras esperaba fuera del hospital junto a su niño para ser trasladada a su región natal, Cherníguiv, al norte de Kiev.


Sheyán explicó que su hijo debe volver a recibir tratamiento dentro de un mes, pero teme que no sea posible por la destrucción causada por el ataque. “Su médico, además, tiene una herida en la cabeza que sufrió al proteger a otro niño durante la explosión”, agregó la madre visiblemente afectada. “No sé qué más decir, estoy en estado de ‘shock’ y no puedo entender cómo pueden atacar un hospital con niños”, señaló la mujer antes de volver a rodear con sus brazos a su hijo.


A su alrededor, una multitud de ambulancias ocupaba la calle cortada trasladado a los niños en situación más precaria. Camiones de bomberos ingresaban en el perímetro del hospital para proseguir con la limpieza de los escombros. El hijo de Marina Ploskonos, de 4 años, fue operado de tuberculosis cervical el pasado viernes. “Mi hijo está aterrorizado”, dijo a la agencia AP. “Esto no debería estar pasando, es un hospital infantil”, dijo, rompiendo a llorar.


Según Natalia Svidler, de 40 años, los pacientes, el personal y los familiares habían corrido al sótano después de que sonara la alarma antiaérea a primera hora del lunes. “Oímos un fuerte estruendo y luego el techo del sótano se desplomó un poco”, explicó Svidler, cuyo hijo Illia iba a ser operado en el hospital a finales de esta semana. “Todo el mundo se asustó mucho, por supuesto. Todo el mundo empezó a gritar y a correr”.


Elecciones francesas: la gran ruptura ya está aquí

JOSÉ JAVIER ESPARZA. gaceta. 9 Julio 2024


El partido más votado en la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas ha sido, de largo, el Rassemblement National de Marine Le Pen y Jordan Bardella: 8,7 millones de votos. Si se le suman los 1,3 millones de los republicanos de Ciotti, alevosamente etiquetados por el servicio electoral del Gobierno como «unión de la extrema derecha» (tal cual, para no andarse con matices) y favorables a apoyar las listas del RN, la cifra global asciende a más de 10 millones de votos. Aquí no se cuentan los escaños ya decididos en la primera vuelta. Ahora bien, viendo la tabla oficial de los resultados de la segunda vuelta, uno constata que los 8,7 millones de votos del RN se han traducido en sólo 88 escaños, mientras que los 7 millones de la ultraizquierda han reportado 146 escaños. Del mismo modo, los 6,3 millones del grupo de Macron se han traducido en 148 escaños. Al final, incorporando los escaños ya decididos en la primera ronda, la Asamblea francesa queda con una mayoría de extrema izquierda (el Nuevo Frente Popular de Melenchon) con 178 escaños, un segundo grupo macronista con 150 escaños, en tercer lugar el RN de Le Pen con 143 escaños y en cuarto lugar Los Republicanos (el centro-derecha) con 39, más otros grupos menores. O sea que el partido más votado queda en tercer lugar en términos de representación. Es evidente la distorsión del voto cuando se traduce en escaños.


Como todo el mundo sabe —o debería saber a estas alturas—, esa distorsión se debe al modelo hipermayoritario del sistema electoral francés, que otorga sólo un escaño por circunscripción y permite que dos o más candidatos perdedores en la primera vuelta concentren el voto para imponerse en la segunda. Eso es exactamente lo que ha pasado y no ha sido especialmente sorprendente, porque muchos observadores (por ejemplo, Santiago Muzio en El Gato al Agua) habían advertido ya sobre el fenómeno. Cuando uno mira los números en detalle, constata que en realidad estas elecciones se han ventilado por unas pocas decenas de miles de votos —así de ajustado ha sido el resultado en numerosas circunscripciones—, y que una variación en esas cifras —un centenar más o un centenar menos en tal o cual circunscripción— habría arrojado un parlamento enteramente distinto. En todo caso, y a modo de balance provisional, lo que se puede concluir es esto:


1. Macron convocó elecciones legislativas para enfriar la victoria del RN en las elecciones europeas. No la ha enfriado del todo, porque lo que ha conseguido es encender la frustración de una Francia mayoritaria que, ganando, pierde.


2. Macron convocó estas legislativas para afianzarse, pero ha conseguido exactamente lo contrario: lo primero que hizo Melenchon en cuanto se vio «ganador» no fue atacar a Le Pen, sino pedir a Macron que «se incline» (sic) y encargue formar gobierno al Nuevo Frente Popular.


3. Este poderío de la extrema izquierda es probablemente el efecto menos previsto por Macron: sin duda el presidente contaba con que, en la segunda vuelta, el discurso «antifascista» le permitiría cosechar la adhesión de la extrema izquierda, pero seguramente pensaba que sería al revés, es decir, con una extrema izquierda subordinada a los candidatos presidenciales, un poco al estilo de Sánchez, y no a la inversa, que es lo que ha sucedido finalmente. La araña Macron se ha enredado en su propia tela.


4. El hecho es que, en la práctica, Macron acaba de entregar el Parlamento a la extrema izquierda. Y además, le ha otorgado toda la legitimidad (artificial, pero efectiva) de la «lucha contra el fascismo” proclamada por los medios y que Macron quería abanderar.


5. Con todo y con eso, el RN añade seis millones de votos y 60 escaños más a sus resultados en las legislativas anteriores. Es el primer partido político de Francia. ¿Puede gobernarse contra él?


6. Si el objetivo era pacificar el paisaje político, el resultado no puede ser más catastrófico: la Asamblea queda dividida en tres grupos minoritarios profundamente distintos, tanto que el país va a resultar objetivamente ingobernable.


Para ulteriores análisis ha de quedar la ceguera voluntaria de la mayoría mediática, empecinada en considerar «extremista» al RN pero no al Frente Popular. También la indigencia ideológica de una buena parte del voto macronista, e incluso de algunos moderados del centro derecha, que han preferido apoyar a las candidaturas de la ultraizquerda antes que al RN.


Y como colofón, la gran pregunta: ¿Qué une realmente a los burgueses macronistas, los socialistas, los comunistas, los islamistas y toda esa gente que ha unido sus votos en estas elecciones? Porque sus respectivos programas son objetivamente contradictorios en muchas cosas. Por eso Bardella (y no sólo él) habló de «coalición contra natura». Es verdad que, en términos políticos tradicionales, el pacto del macronismo con todas las izquierdas duras o blandas es contra natura. Ahora bien, tal vez haya que pensar que es que la «natura» ha cambiado. Esta no es ya la de los términos tradicionales de derecha e izquierda, capitalismo y socialismo, etc., sino otra realidad distinta: los partidarios del globalismo y del borrado de las identidades nacionales contra los partidarios de acentuar la soberanía nacional. Desde este punto de vista, el pacto francés tiene todo el sentido del mundo, pues en lo único en lo que realmente coinciden macronistas, liberales, progresistas fluidos, socialistas, comunistas y filo islamistas es en el rechazo de la preferencia nacional. Globalismo contra soberanismo. Ésta es la gran ruptura que define a nuestro tiempo. Hay que optar.


Sobre las elecciones en Francia

RICARDO RUIZ DE LA SERNA. gaceta. 9 Julio 2024


Algunas notas de urgencia sobre las elecciones legislativas en Francia.


En la magnífica Vencer o morir, el primer largometraje producido por Puy du Fou, se dice que «nada se pierde». En Francia, la derecha patriótica, soberanista y popular viene creciendo desde hace años. Impide su victoria la unión de unas fuerzas que, entre sí, sólo coinciden en el odio a las clases populares francesas. Estas fuerzas van desde la izquierda caviar hasta las élites del capitalismo moralista pasando por los islamistas y los comunistas. El macronista del centro de París y el islamista que anhela el califato sólo coinciden en su desprecio por los franceses de raíces, es decir, los perdedores de la globalización, los excluidos de los planes sociales y los alienados en sus propios barrios.


Los pretendidos triunfadores de la noche electoral empuñaban banderas marroquíes, argelinas y palestinas, sostenían pancartas contra la emergencia climática o reivindicaban que el tejido del país son los inmigrantes. A los perdedores sólo les quedaba la tricolor.


Sin embargo, haciendo buena la cita cinematográfica, «nada se pierde». La Agrupación nacional ha obtenido la mayoría de los votos que el sistema electoral ha convertido en menos escaños que los correspondientes al Nuevo Frente Popular —la coalición de comunistas, ecologistas e islamistas— y a Ensemble, la coalición de los macronistas. En efecto, de 28.870.328 votantes, el 66,63% del censo, más de diez millones de franceses votaron a la Agrupación Nacional y sus aliados. En segundo lugar, quedaron los poco más de siete millones de votos del Frente Popular y en tercero los al más de seis millones de los macronistas. Sin embargo, el número de escaños no hace justicia a los votantes: a la Agrupación Nacional de momento, sólo le corresponden 142 mientras que el Nuevo Frente Popular obtiene 178 y Ensemble 150.


Así, el partido mayoritario obtiene menos escaños que sus dos adversarios.


Por supuesto, el Nuevo Frente Popular y Ensemble apenas tienen nada en común. Probablemente Ensemble tratará de romper el Nuevo Frente Popular de modo que el macronismo forme gobierno. En realidad, no es preciso que el Nuevo Frente Popular gobierne para que Francia siga hundiéndose. Las políticas del macronismo se han bastado solas para que la inmigración descontrolada, la islamización rampante y la crisis económica y social hayan roto el país. La guerra contra las clases medias y populares francesas la inició Macron, aunque Melénchon no tiene intención alguna de detenerla. El precio de las políticas multiculturales lo seguirán pagando los mismos gobierne quien gobierne.


Es difícil vaticinar si estos resultados desmotivarán a los votantes de la Agrupación Nacional o si sólo servirán para agravar el descontento de aquellos a quienes Eric Zemmour denominó «los exiliados del interior». Lo cierto es que, salvo quedarse en su casa, esos ciudadanos que ya no reconocen el país en el que viven no tienen muchas alternativas viables. Fuera de la Agrupación Nacional y su campo sólo están quienes los han llevado al exilio o quienes pretenden mantenerlos en él.


El eje izquierda-derecha, que sigue siendo muy robusto, ha devenido insuficiente para explicar la política europea. Hay una derecha globalista que odia a las clases populares nacionales y que desprecia todo aquello que vertebra la comunidad nacional. Hay una izquierda educada en el odio a la nación en busca de una identidad alternativa ya sea el ambientalismo, las causas sociales o el islamismo. Están dispuesto a renunciar a Francia con tal de sentirse reconfortados en su pretendido anticolonialismo. Hay otras variables importantes (campo ciudad, ricos-pobres, franceses de raíces-franceses de papeles…) pero todas ellas convergen en la cuestión nacional, que en Francia no es sólo territorial, sino civilizacional.


Las próximas elecciones, en principio, están previstas para el 11 de abril de 2027. Macron dispone de casi tres años para neutralizar a esos diez millones de franceses que han votado a la Agrupación Nacional y sus aliados. Hasta ahora, las etiquetas —fascistas, racistas, nazis, homófobos, xenófobos— se han ido agotando sin que el crecimiento se detenga. Al contrario, las elecciones europeas y las legislativas parecen haberlo acelerado. La alianza con los comunistas, los ecologistas y los islamistas quizás le permita formar gobierno, pero dejará definido, bien a las claras, qué campo les queda a los patriotas que quieren una Francia reconocible.


Ya lo dicen en la película: «Nada se pierde».


LE PENALIZA EL SISTEMA ELECTORAL

Agrupación Nacional se consolida como el partido más votado de Francia pese a no vencer en escaños

AGUSTÍN BENITO. gaceta. 9 Julio 2024


La coalición de extrema izquierda Nuevo Frente Popular logró 182 escaños en la Asamblea Nacional de Francia tras la segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas celebradas este domingo. Agrupación Nacional logró 143 asientos (tenía 89) y quedó en tercera posición en escaños, aunque ninguno de los partidos logró la mayoría absoluta de 289 diputados.


El segundo grupo en la cámara baja es para los partidos afines al actual presidente de Francia, Emmanuel Macron, que consiguió 168 asientos en unos comicios marcados por una participación que llegó a superar el 65%.


El candidato a primer ministro de RN, Jordan Bardella, denunció que las alianzas políticas «antinaturales» y «deshonestas» evitaron una alternativa patriótica en el país. que han dado la victoria al Nuevo Frente Popular. «Estos acuerdos electorales arrojan a Francia en brazos de la extrema izquierda de Jean-Luc Mélenchon», añadió. Así, reprochó las «componendas electorales orquestadas desde El Elíseo entre un presidente de la República aislado y una extrema izquierda incendiaria».


Pese a su tercer puesto en escaños, Agrupación Nacional fue la primera fuerza en número total de votos con más de 10,11 millones. La extrema izquierda consiguió 7,04 millones y Emmanuel Macron 6,69.


La Asamblea Nacional gala está compuesta por 577 diputados, elegidos por otras tantas circunscripciones repartidas tanto en la Francia continental como en los territorios de ultramar. Son elegidos por un sistema de balotaje en circunscripciones uninominales que perjudica a la derecha soberanista. En esta segunda vuelta, los partidos se enfrentaron en 409 duelos, 89 triangulares y dos cuadrangulares en 501 circunscripciones (76 fueron elegidos en la primera vuelta). La extrema izquierda retiró 130 candidatos (presentó 281) y los centristas retiraron 80 (presentaron 227) para ayudarse mutuamente y evitar la mayoría de la derecha soberanista. Son numerosas las circunscripciones en las que RN logró más del 49% de los votos.


Por ejemplo, Caroline Le Pen, hermana de la dirigente Marine Le Pen, fue derrotada este domingo por sólo 225 votos. Competía por un escaño en el departamento de Sarthe (oeste) y perdió ante la candidata de la unión de extrema izquierda izquierdas Elise Leboucher por 24.136 votos (50,23 %) frente a 23.911 sufragios (49,77 %).


La propia Marine Le Pen afirmó que la victoria de su partido político «solamente se retrasa». «La marea está subiendo. Esta vez no ha sido suficiente y, por tanto, nuestra victoria sólo se retrasa», concluyó.


La doble vuelta del PP

HUGHES. gaceta. 9 Julio 2024


En unas declaraciones, Borja Sémper pedía ayer que la política volviera a ser aburrida. Es el «no se meta en política», el «dejémosla a los que saben» de los Del Río, o sea, más rajoyismo, que aquí venimos los tecnócratas. Pedir aburrimiento estando como está el mundo resume una actitud ante el, digamos, hecho democrático.


La recepción de las elecciones francesas son otro ejemplo. Los medios progubernamentales (ibexquierdistas) siguieron aquí con su delirio de escena de Casablanca, gente que detiene a los nazis cantando La Marsellesa. No hemos pasado de Hollywood y últimamente ya ni siquiera de Netflix. En realidad, ellos miran a Francia como se mira a un aprendiz, pues aquí no han necesitado ese nivel de inmigración para desarrollar una fuerza antinacional. Lo han hecho con los autóctonos.


El mundo pepero, por su parte, acogió con característica gravedad el ascenso de la izquierda, la habitual mezcla de miopía y pomposidad («Es el fin de la V República»; si solo fuera eso…). Ya tienen los Federicos otro comunismo, el islamocomunismo, para vender el librillo. El islam sería como Putin, lo mismo fascismo que comunismo. Tocaba, pues, meter miedo ahora con la victoria izquierdista e islamista sin enfocar demasiado al pirómano Macron o el papel de Los Republicanos, el PP de allí.


Porque no es que ganara la izquierda, es que a ello colaboraron unos y otros muy activamente. Ese pequeño detalle se ha ido orillando en la terrible peperosfera, los norcoreanos del «humanismo liberal». Pareciera que la izquierda ha ganado por las palabras de Tchouaméni y no por una epocal cesión del institucionalismo ni por algo que va mucho más allá: la real coincidencia de intereses entre las izquierdas, el centro y la derecha de la alternancia de posguerra, las tres, en ataque conjunto a lo nacional, a la estructura de lo nacional. Esa coalición en apariencia disparatada y oportunista contra ‘la ultraderecha’ en el fondo no lo es tanto, y tiene más sentido y razón de ser de lo que nos han contado (que nos han contado poco). No ha sido solo un ataque «jupiterino» de Macron, sino algo dramático y colectivo, entre la rendición y el engaño, que quedaría como una traición legendaria si nuestro tiempo aun fuera capaz de forjar tal cosa.


El PP, que participa en el mismo volantazo globalista, no puede criticar mucho a Macron porque quiere ser Macron, liderar esa ensalada centrista, confundirse con las instituciones, mangonearlas y vivir electoralmente del miedo «a los extremos», para lo cual necesita acabar con la política.


Francia ha sido muy ilustrativa para ayudarnos a entender el comportamiento del PP, también un poco a «doble vuelta». Hace ese uno-dos que hemos visto allí. Primero participa del miedo y rechazo a la «extrema derecha» en connivencia cínica con las fanfarrias mediáticas del PSOE y luego capitaliza el miedo al comunismo, al wokismo y la inmigración que ellos mismos han ayudado a elevar. Para una cosa usan la palabra «moderación»; para otra el comodín «liberal».


La gran y descacharrante operación de Macron y el papelón de Los Republicanos (les peperois) nos han permitido reconocer en su esquema algo que nos resulta familiar, el mismo actuar del PP, que contiene siempre esos dos tiempos. Mientras ejecuta el doble movimiento, ese egipcio ideológico, ese gritito bifronte, su auténtica preocupación —y ahí se acaba la moderación— es que en España no crezca una tercera voz nacional apegada a la realidad y a lo popular.


MIENTRAS AGRUPACIÓN NACIONAL SIGUE AVANZANDO

Lecciones de Francia: el sistema prefiere a la extrema izquierda islamista que a Marine Le Pen

JAVIER TORRES. gaceta. 9 Julio 2024


El mundo del dinero, la UE, Sánchez, Feijoo, la extrema izquierda, Marruecos y Hamás celebran la victoria del Nuevo Frente Popular francés en la segunda vuelta de las legislativas. La estigmatización realizada al partido de Marine Le Pen ha dado sus frutos: Agrupación Nacional ha sido la tercera fuerza en escaños tras ganar con solvencia hace una semana en la primera vuelta. De nuevo, la opción soberanista se queda a las puertas de la victoria. Sin embargo, estos comicios revelan un dato a tener en cuenta: en apenas dos años Marine Le Pen ha subido de 89 escaños a 143 y del 17,3% de los votos al 24,8%. En términos absolutos es el partido más votado de Francia con 10,7 millones de votos, seguido del Nuevo Frente Popular con 9 millones y la coalición centrista con 7 millones. Si es el más votado, ¿por qué no ha ganado las elecciones? La respuesta es sencilla: la alianza de la extrema izquierda y el centro ha logrado frenar a Marine Le Pen al retirar de todas las circunscripciones a los candidatos que quedaron terceros en la primera vuelta para concentrar el voto contra RN. De tal modo que los partidarios de Macron han votado a la extrema izquierda en muchos territorios y en otros los de Mélenchon han votado al centro. Histórico abrazo entre el gran capital y la extrema izquierda islamizada.


Esta aparente contradicción o alianza contra natura, sin embargo, es el síntoma que mejor explica la realidad de un continente, Europa, que avanza hacia el precipicio. A continuación, algunas claves de las elecciones legislativas en Francia:


1. Islamización o Europa. Ya sólo hay dos tipos de partidos en el viejo continente: los que favorecen la islamización de Europa y los que la combaten. El resto es pura distracción. Diferencias programáticas al margen (modelo económico proteccionista o liberal), en Europa hoy sólo hay una gran cuestión: la inmigración de carácter islamista. La división izquierda-derecha ha muerto en términos reales, el eje que mejor explica la realidad es el de patriotas-globalistas, aunque la mayoría de los medios de comunicación replican interesadamente los viejos esquemas del bipartidismo. Francia es el paradigma de que Europa ha cambiado y los partidos deben posicionarse con claridad acerca de si quieren sociedades multiculturales donde el islam acabe socavando la identidad nacional. Sin ir más lejos, durante la celebración de la victoria de la extrema izquierda en la plaza de la República de París apenas se vieron banderas francesas. Abundaban las enseñas marroquíes, palestinas y argelinas. La única tricolor visible era una de gran tamaño en la que podía leerse “Francia es de los inmigrantes”.


2. Las etiquetas pesan más que la realidad. El miedo a una abstracción, el espantajo de la extrema derecha, pesa más que la cruda realidad: 70 mujeres son violadas a diario en Francia y hay más de 1.000 homicidios al año. Los atentados terroristas de signo islamista se han multiplicado (Bataclan, 130 asesinados; Niza, 86 asesinados, Charlie Hebdo…) en los últimos tiempos, pero nada de eso parece igual de grave que la posibilidad de que gobierne Marine Le Pen. El youtuber Wall Street Wolverine ha compartido un vídeo en el que un reportero pregunta a tres miembros del movimiento LGTBI en las fiestas del orgullo gay de Madrid si prefieren una España gobernada por VOX o un califato islámico. Los tres responden que mejor el califato. «Me da más miedo VOX, son nazis».


3. Quien controla los medios controla el pensamiento. Creer que el mayor peligro para tu seguridad y libertades es la venida del fascismo mientras islamizan tu país a pasos agigantados sólo es posible por el estado de psicosis generado por quienes dominan los medios de comunicación. Hay más miedo al monstruo que han creado con la ‘ultraderecha’ que a la realidad que ha impuesto la brutal islamización que padecen Francia y gran parte de Europa.


4. Islam e izquierda, el agua y el aceite. ¿Cómo pueden aliarse la izquierda laica, feminista y LGTBI con el islam que abomina de todo ello? A menudo se ridiculiza esta alianza como fruto de la ignorancia o ingenuidad de ambos actores. Nada de eso. La izquierda posmoderna (también el mundo del dinero) y el islam se abrazan de forma consciente en su objetivo común de acabar con la identidad europea, en gran parte representada por la cruz, elemento que vertebra lo que queda del continente.


5. Le Pen sigue avanzando. La victoria no acaba de llegar. Como en la novela de Houellebecq (“Sumisión”), parece que en Francia gobernará antes un partido islamista que uno de carácter nacional que abogue por la recuperación de la identidad autóctona y frene la inmigración como el de Le Pen. A pesar de la brutal demonización que sufre por parte de la UE, la extrema izquierda y el resto del sistema, el RN es el primer partido de Francia con 10,7 millones de votos (logró 4 millones en las legislativas de 2022). ¿Llegará Marine Le Pen a tiempo de alcanzar la victoria en las presidenciales de 2027?


6. ¿Guerra civil? ¿Hay solución posible a través de las urnas? Son las preguntas que se hacen muchos franceses. Macron alude a esta posibilidad cada vez que Le Pen está a punto de ganar unas elecciones. En 2021 un grupo de militares en activo publicó una carta en la que advertían del riesgo de un estallido de una contienda civil, pero no por los motivos que esgrime Macron, sino por todo lo contrario: la nula voluntad de integración de la población musulmana en la sociedad gala. “Vemos la violencia en nuestras ciudades y pueblos. […] Vemos como el odio contra Francia y su historia se convierte en la norma. […] Esta decadencia anuncia un caos y violencia que no vendrán de un pronunciamiento militar, sino de una insurrección civil. […] Si estalla una guerra civil el Ejército mantendrá el orden en su propio suelo. […] Nos hemos dejado la piel para destruir el islamismo al que ustedes hacen concesiones sobre nuestro territorio. […] Actúen, señoras y señores. No se trata de prolongar sus mandatos o de conquistar otros. Se trata de la supervivencia de nuestro país, de su país”.


7. ¿Para qué vale el centro? Llevan años proclamando el peligro de los extremos y a la hora de la verdad el centro francés -modelo recurrente para el amplio espectro que ocupó CS y ahora parasita el PP- pacta con la extrema izquierda para evitar la victoria de RN. La llamada moderación prefiere seguir ocultando la Francia de la racaille, la sharía y las 70 violaciones diarias inexistentes en los medios de comunicación. Esta puñalada al propio pueblo francés recuerda a la caída de Roma: los bárbaros sólo pudieron destruirla una vez que ésta se había corrompido por dentro.


Francia, ingobernable y en manos de la peor izquierda
EDITORIAL. libertad digital. 9 Julio 2024


La segunda vuelta de las elecciones legislativas francesas ha supuesto un vuelco respecto a los resultados de la semana pasada, donde el partido de Marine Le Pen se impuso a sus rivales por una amplia mayoría. En esta ocasión, la estrategia conjunta del centro y la extrema izquierda de retirar sus candidatos peor colocados para hacerse con la mayoría de distritos electorales se ha saldado con un éxito rotundo que deja a la Agrupación Nacional de Le Pen como la gran derrotada de estos comicios.


El resultado de estas legislativas, adelantadas apresuradamente por Emmanuel Macron a raíz del batacazo de su partido en las pasadas europeas, ratifica así mismo la debacle de su movimiento centrista y ha puesto de manifiesto la debilidad del liderazgo nacional de un político elitista, cada vez más alejado de las verdaderas preocupaciones y necesidades del pueblo francés.


Macron lo ha fiado todo a la necesidad de parar los pies a la extrema derecha, que amenazaba con hacerse con la mayoría absoluta de la Asamblea Nacional. La consecuencia es que ahora tendrá que convivir con un personaje atrabiliario como Jean Luc Mélenchon que, al frente del Nuevo Frente Nacional, viene dispuesto a hacer saltar por los aires todos los consensos políticos, económicos y sociales sobre los que se asienta la V República.


El parlamento francés surgido de estas elecciones está fragmentado en tres grandes bloques de difícil, por no decir imposible, conciliación. El líder de la ultraizquierda, ganadora de las elecciones, reclama el puesto de primer ministro y una amplia representación en el nuevo gabinete. Hablamos de un político radical que hace gala de un antisemitismo atroz y exige implantar un programa de máximos con medidas populistas surgidas del comunismo más rancio. Su rechazo a la OTAN, su proximidad a Putin y la defensa encendida del terrorismo islamista, del que presume en sus intervenciones públicas, convierten a Mélenchon en un peligro para Francia y Europa mucho mayor, desde luego, que el que representa Marine Le Pen, cuyas propuestas son indudablemente mucho más moderadas.


Por eso resulta sorprendente asistir a las muestras de alivio generalizado con que los grandes medios han saludado la victoria del Nuevo Frente Popular, como si Mélenchon fuera un político moderado compatible con los usos democráticos y no un marxista fanático dispuesto a poner fin a todos los consensos establecidos desde De Gaulle.


A la espera de lo que decida Macron en las próximas semanas, lo que han dejado claro las elecciones legislativas francesas es que la V República Francesa ha muerto, sin que sepamos todavía qué nuevo modelo de relaciones institucionales va a surgir en un país que, desde ayer, depende para ser gobernable del peor populismo marxista.


Los lepenistas claman contra el sistema electoral frente al "atraco democrático" de Macron

Luis Rivas (París). vozpopuli. 9 Julio 2024


Amarga resaca electoral para los votantes de Reagrupamiento Nacional. Los partidarios de Marine Le Pen y Jordan Bardella saben que es complicado buscar excusas, pero no pueden quitarse de la cabeza, lo que consideran un sistema electoral injusto. Muchos se preguntan hoy cómo es posible que con más casi diez millones de votos (9.929.069) su partido haya quedado por detrás de las izquierdas del “Nuevo Frente Popular” (6.374.582) y de la coalición de Emmanuel Macron, “Ensemble” (6.096872).


El sistema electoral francés está ideado no para ganar, sino para evitar una victoria del rival, se lamentan. Es un modelo de escrutinio que prima las coaliciones de perdedores, estiman hoy votantes y militantes frustrados por la derrota del domingo. Por eso claman contra un “robo electoral”. En las redes sociales se repiten y multiplican los mensajes que insisten en decir que, con un sistema como el británico, Jordan Bardella habría sido jefe de gobierno desde la primera vuelta de las legislativas, el 30 de junio.


El sistema mayoritario, a dos vueltas, y sin una pizca de proporcional, produce estos resultados, pero en Francia todas las fuerzas políticas lo conocen y los dirigentes de RN saben que criticarlo hoy sería mostrar una imagen de malos perdedores. Marine Le Pen ya dijo también antes de los comicios que llevan aceptando los resultados electorales desde hace 50 años, sin ponerlos en duda. Pero uno de los dirigentes del partido, Laurent Giaconbelli, denuncia un “atraco democrático de Macron”, por su acuerdo con la extrema izquierda. Bardella y Le Pen ya vituperaron, antes y después del domingo la “alianza contra natura y sin honor” entre macronistas y las izquierdas aglutinadas en el NFP.


El proceso de desistimiento pactado entre Macron y Melenchón para retirar a sus candidatos en las circunscripciones donde una triangular pudiera llevar a la victoria a RN ha propiciado la derrota del partido que saca una ventaja de tres millones de votos a cada uno de sus dos principales rivales pero que se tiene que conformar con 143 escaños, menos que el bloque macronista, 163, y que la alianza de izquierdas vencedora, 182. Seis de cada cuatro franceses han votado por RN. Es la fuerza política que más ha progresado en la Asamblea; de 89 ha pasado a 143 diputados, pero ello no alivia la amargura.


El techo de cristal que ha impedido a Marine Le Pen acceder al Elíseo en 2017 y 2022 ha quedado reforzado por el acuerdo de las izquierdas y el centro. Pero la dirección de RN debe buscar también las razones de su derrota, independientemente del sistema electoral. Es difícil luchar contra todo un “establishment” político, mediático y cultural en contra, pero en RN saben qué haber apostado por la ambigüedad sobre su programa en la recta final, no ha ayudado. Tampoco ha jugado a su favor la selección de candidatos en algunas circunscripciones.


Cuando ya no se podían retirar candidaturas, Le Pen y Bardella descubrieron que dos o tres descerebrados, racistas y pronazis, destrozaban su proceso de “desdemonización” y daban pie a quienes les consideran “ultraderecha” e, incluso, “fascistas”. Marine Le Pen no estaba con muchas fuerzas en la noche del domingo para levantar el ánimo de sus tropas. Prefirió citarles para 2027; será su tercer intento para acceder a la presidencia del país. Tres años para preparar una nueva estrategia contra el “cordón sanitario” que la impide acceder al poder.


Europa convulsiona

EDITORIAL. el debate. 9 Julio 2024


Mientras la derecha no se libere del relato de la izquierda, las opciones radicales de verdad seguirán haciendo muy difícil la alternativa


El resultado de las Elecciones en Francia no despeja ninguno de los grandes problemas que sufre uno de los motores de Europa y le añade otros nuevos, como la debilidad del movimiento creado por Macron, hoy en minoría y con dificultades para completar el ciclo natural en la Presidencia de la República, hasta 2027.


Si la jugada de Macron de anticipar comicios legislativos fue temeraria, sus consecuencias no pueden ser buenas. Y no lo es, por mucho que se insista en las bondades de haber frenado a Marine Le Pen, haber reforzado un Frente Popular encabezado por un partido radical, la Francia Insumisa, cuyo líder es directamente un peligro público.


Que la Asamblea gala vaya a tener como primera fuerza a una formación capitaneada por un extremista como Mélenchon es una tragedia: reniega del libre mercado, propone recetas económicas asistencialistas, clientelares y ruinosas, es declaradamente antisemita, coquetea con Hamas y con Putin y representa un populismo empobrecedor incompatible con el progreso de su país y, por tanto, de Europa.


Si para frenar a la presunta extrema derecha, que es más un fenómeno de nacionalismo en tiempos de globalismo y se presenta con caras y propuestas tan diversas como la de Orban en Hungría o Meloni en Italia, hay que estimular el blanqueamiento de la extrema izquierda, las consecuencias pueden ser devastadoras.


Y eso es lo que ha hecho Macron, anteponiendo un cordón sanitario a la evidencia de que, por hacerlo, suscribía un relato perverso que recorre toda Europa: el de una izquierda radicalizada, como la de Pedro Sánchez en España, que legitima todas sus alianzas, criminaliza las de sus rivales, solo acepta pactos moderados para conservar el poder y, en la práctica, hace inviable la alternativa.


El Presidente de Francia ha abonado el camino a políticas regresivas, más conectadas con Moscú, Pekín o incluso Teherán que con Bruselas, y lo ha hecho sin establecer un relato alternativo al de los extremos que genere consensos básicos en la política tradicional.


Su reflejo en España es evidente, y muy peligroso, con un PSOE que persigue al PP, busca fórmulas infames para compensar sus derrotas electorales y estigmatiza los razonables pactos que pueda alcanzar con VOX.


El resultado de eso es validar coaliciones con el populismo de Sumar o de Podemos, intervenidas por un separatismo voraz, para implantar una lucha de bloques que justifique, de facto, un cambio de régimen político.


Si en Francia está amenazada la V República, por el incierto panorama creado por los comicios y la posibilidad de tener que adelantar el paso por las urnas para escoger Presidente; en España lo está la Monarquía Parlamentaria por idénticas razones: el auge de fórmulas parecidas al Frente Popular, poco representativas en realidad de las sociedades donde se implantan pero viables por los apaños aritméticos que generan; y un debilitamiento de las opciones alternativas, maniatadas por una pinza perversa.


Europa, en fin, tiene un grave problema. Y no es la ultraderecha, precisamente: se trata de un radicalismo político que apuesta por la demagogia, los enfrentamientos civiles, los dogmatismos ideológicos y la conformación de sociedades subsidiadas fáciles de orientar electoralmente para facilitar, a renglón seguido, un sistema político peligroso, empobrecedor y abolicionista de los valores tradicionales que siempre consolidaron el mayor espacio de libertad y progreso alumbrado por la humanidad.


Los recientes pactos en Europa entre populares y socialdemócratas podrían ser una razonable respuesta si le añadieran dos condiciones: la obligación de trasladarlos al ámbito nacional de cada socio, lo que en el caso de España hubiera apartado a Sánchez del Gobierno y el mandato de asumir, desde esa alianza, problemas objetivos como la inseguridad, la degradación de la identidad o la inmigración irregular. Si no, solo sirven para repartirse el poder y desatender las expectativas y preocupaciones de los ciudadanos.


Enfangados en el albañal de la zahúrda «Moncloaca

Jesús Salamanca. diariosigloxxi. 9 Julio 2024


La imputada, Begoña Gómez, no sabe lo que es eso de enfrentarse en sala a un juez, un fiscal, abogados acusadores, abogado defensor, etc. Ha estado mimada y protegida hasta límites insospechados, tanto que se ha saltado cuantas líneas rojas ha encontrado. Pero debería saber que, si todo cerdo tiene su San Martín, todo mafioso acaba en la celda merecida tras sus corrompidas lágrimas de cocodrilo. Y como éramos pocos parió el vespino, ¿qué es eso de que la «señora catedrática» no quiere que sea grabada su imagen declarando en el Juzgado como imputada por corrupción? ¡Pobre ignorante que se cree por encima de tirios y troyanos!


No querías una taza, pues toma dos. Desde esta mañana su imagen entrando en el Juzgado recorre los medios que no pertenecen al pesebre de «Moncloaca» y muchos otros medios serios de todo el mundo. En ellos se menciona al felón (se fue al fútbol con absoluta despreocupación, cual demostrado psicópata) y se subraya que la compañera del presidente socialista de España «es acusada de corrupción y tráfico de influencias», sin el limitador de «presunta». La imagen que proyecta el Gobierno de España en el mundo, y sobre todo el «puto amo» es de miseria, desigualdad, corrupción, latrocinio, falsedad, represión a la ciudadanía, mafia escandalosa y compañera, mujer o barragana a su aire.


Esta muchacha presuntamente enfangada -- aunque la sociedad ya ha dictado sentencia-- no se ha enterado que fueron grabadas muchas otras personas prestigiosas, sin duda mucho más que ella. Al fin y a la postre, ella solo es morbo, mofa, desprecio y repudio. Doy fe de ello. Nadie se ha atrevido a decirle que carece de prestigio, como así piensan los trabajadores y asesores de «Moncloaca», pero no lo dicen a la cara de quienes echan todos los meses el pienso en su pesebre y pagan la paja calentita de su casa. Seguramente que tales aborregados también tendrán gratuidad o ayudas para el nuevo «pajaporte» que les permita acceder al sexo de medios plataformas y televisiones.


La ignorancia de esta pija-progrele hizo llegar a exigir a la Universidad Complutense que apareciera en la cátedra como licenciada, cuando no tiene más estudios que el bachillerato y otros de un centro privado sin validez académica. Por cierto, un bachillerato ramplón y tan dudoso como la tesis «cum fraude» de su felón compañero, segunda pareja o ronzal de costumbre.Por cierto, ¿investigará Hacienda el patrimonio de la anterior y primera pareja de Begoña Gómez? ¿Investigará Hacienda el permiso de paternidad que solicitó el hermano de Sánchez, sin ser padre, falsificando documentación presuntamente? Lo que es brujas, haberlas, haylas, pero ya son excesivas.


Mucha chapa y pintura para esta presunta mafiosa de Begoña Gómez, pero demuestra menos luces que un barco pirata en el alta mar. Hicieron el paseíllo gente como Urdangarín, su esposa Cristina, Felipe González, Rodrigo Rato, Griñán, Chaves, la Pantoja, Julián Muñoz, Ruiz Mateos e hijos, Francisco Camps, Imanol Arias y su esposa en la serie… ¡Y eso que todos tenían más prestigio que Begoña y menos fechorías a la vista, incluso muchos ni siquiera estaban imputados! Hoy se les llama «investigados», pero el golpista será golpista hasta el fin de sus días por muchos indultos que tenga encima y el ladrón será ladrón mientras viva, por muchas amnistías que se le apliquen y así sucesivamente.


¿Alguien piensa que Sánchez dejará de ser mentiroso, felón y mafioso por muchas bendiciones que le traiga Yolanda Díaz del Vaticano? ¿Alguien cree que la ministra oculta y ‘desaparecida’ de la escena pública, Sira Rego, dejará de admirar a Hamás por muchos rosarios que le regalen en Líbano para que pase su admiración a los terroristas de Hezbolá?


Con tanta igualdad falseada y falsificada en la extrema izquierda, ahora resulta que a la «Bego» no le falta despacho en «Moncloaca», sede del bulo y el fango, además de citar allí a empresarios para enfangarlos, así como a su cuñado músico no le falta despacho desde el viernes pasado en la Diputación de Badajoz o dispone de dos DNI (español y portugués, aunque no declare a la Hacienda española). Otro día hablaremos del bulo de los dos DNI del juez Peinado y de cómo la prensa digital pesebrera se apunta a un bombardeo por muy inútil que sea.


Esa igualdad falsificada se ha vuelto a demostrar en la citada Diputación y en los Juzgados de Plaza Castilla. Todo lo que rodea a la máquina del fango sigue enfangado y el albañal cada día es más grande, como las zahurdas de los cientos de asesores, sin nada que asesorar, de Pedro «cum fraude». Confieso que ni el presidente de USA tiene tantos privilegios, al igual que tampoco los tenía de ese calibre Al Capone en los Juzgados de la época, así como en España tampoco los tuvo Luis Candelas, ni Eleuterio Sánchez (“Lute”), ni el Dioni.


Por cierto, tampoco llevaban tanta seguridad al Juzgado, pagada por todos los españoles, ni viajaban 39 veces en Falcon a Santo Domingo, aunque no se sabe a qué, pero ya lo investigan equipos de periodistas desplazados «ad hoc». ¿Y si aparece dinero en cuentas «Off shore» de la mafia socialista de «Moncloaca» o de algún testaferro que vivió en San Petersburgo y ahora en Portugal? ¿Sabe más el Mossad por viejo que por pellejo? ¿En qué Cancillerías liberó la última información? Sólo pregunto.


Las mafias no funcionarían en los Juzgados si no fuera por los favores que llegan del exterior y las prebendas que se entregan desde dentro. ¿Quién accedió a que no hiciera Begoña Gómez el paseíllo? ¿Quién fue tan torpe que aceptó la treta de la otra mafia de “Moncloaca”? ¿A quién o quiénes hay que denunciar por ser el último responsable de la bajada de pantalones?


******************* Sección "bilingüe" ***********************


España plural, Cataluña singular

JUAN CARLOS GIRAUTA. el debate. 9 Julio 2024


El clasismo catalán es explícitamente supremacista desde el gobierno imbécil de Artur Mas y sus talibanes. Antes se disimulaba, había un desprecio cariñoso, paternalista, teóricamente integrador. Los catalanes de primera recompensaban con una sonrisa de aprobación a los «nuevos catalanes»


El nacionalismo de secesión se nutre de singularidades. Solo que en España, ¿quién no es singular? Pretenden privilegios por tener «historia propia». ¡Cualquier aldea la tiene! Y las tierras que han sido reinos –tenemos unas cuantas– ni te cuento. A la vieja y ceremoniosa Navarra se la considera parte de Euskadi, constructo contemporáneo, por la oceánica ignorancia. En realidad, los nacionalismos vasco y catalán arraigan en el racismo. Está en sus textos fundacionales. Entiendo que no apetezca visitarlos, pero pueden comprobarlo en 'La raza catalana', de Francisco Caja. Después del Holocausto resultó peliagudo invocar la raza, así que se apostó todo a la lengua.


La comunidad de hablantes también fue un rasgo nacional desde el origen de la ideología nacionalista. «Di nosotros, no yo», reclamó Mazzini para unificar Italia. Ayn Rand le dará la vuelta como a un calcetín: «Nunca pronuncies la palabra nosotros». Hay un «nosotros» pequeñín, un 'nosotritos', para nacionalismos como el catalán y el vasco. Los que, lejos de crear Estados nación, los revientan. Nuestra pluralidad lingüística, por voluntad del PSUC y luego de Pujol, guía de mentecatos, acabaría en la violación de derechos masiva y diaria que hoy persiste. Se llama inmersión lingüística, se extiende, y la defiende el PSOE a capa y espada, en tanto que el PP no ha movido un dedo contra ella hasta que se ha visto obligado por Vox. Es una cruel modalidad de clasismo que condena a los alumnos de las escuelas pública y concertada a hablar y escribir mal toda su vida el castellano y el catalán, en tanto que los alumnos de la privada se manejan bien en varios idiomas.


El clasismo catalán es explícitamente supremacista desde el gobierno imbécil de Artur Mas y sus talibanes. Antes se disimulaba, había un desprecio cariñoso, paternalista, teóricamente integrador. Los catalanes de primera recompensaban con una sonrisa de aprobación a los «nuevos catalanes» (por usar la categoría de Paco Candel) que usaban el catalán con ellos o en público. ¿Gozarían viéndolos sufrir, constatando su incapacidad para terminar una frase correctamente, para pronunciar una sola palabra sin delatar su alteridad, su ajenidad? De ahí nació el Pijoaparte de Marsé, dignidad de ficción.


Qué aprobación irritante, cuánto detritus mental y sentimental se alojaba en microgestos imperceptibles para el no iniciado: podía ser un abrirse las fosas nasales dos milímetros. En una ceremonia vergonzosa, las masas se cambiaron el nombre de pila, y no pocos los apellidos no autóctonos. Todo para parecer lo que ya eran: catalanes. Los Pérez pasaron a llamarse Peris; los Rodríguez, Rodri; los Fernández, Ferran; los López, Llopis; los Sánchez, Sanchís. Y todo así. La singularidad financiera será el privilegio catalán de nuestra época, como el proteccionismo lo fue del franquismo. Y el PP no lo evitará: lo consolidará. Feijóo, 2016, Cercle d’Economia: «En la discusión constituyente se llegó al acuerdo de que Cataluña no tuviese concierto. Ahora bien, es verdad que estas cosas se puedan cambiar y se puedan plantear y se pueden discutir, ¿no?»


El orgullo islámico

PABLO PLANAS. libertad digital. 9 Julio 2024


Las manifestaciones del "orgullo" en España se han convertido en exhibiciones de odio hacia los judíos y de apoyo a la organización terrorista palestina Hamas. Los alegres manifestantes tal vez ignoran que en el mundo islámico se asesina sin contemplaciones ni consecuencia alguna a los homosexuales, a quienes llaman invertidos, pervertidos e infrahumanos. En ningún territorio palestino se admitirían muestras como las de estos días en las principales ciudades españolas. De celebrar algún orgullo sería el orgullo misógino por el maltrato sistemático a las mujeres o el orgullo pedófilo por la laxitud de las costumbres en lo que se refiere al sexo y al matrimonio con menores.


Lo cierto es que las manifestaciones del "orgullo" cada vez tienen menos que ver con la defensa de los derechos sexuales, sociales y humanos y más con la agenda woke del comunismo. Si el Che Guevara levantara la cabeza pondría el grito en el cielo y encerraría a todos los manifestantes en aquellos campos de concentración cubanos que practicaban "terapias" de reorientación sexual. Y aún así hay quien luce camisetas de ese personaje en las manifestaciones.


También hay quienes lucen la sardina cerca de las ministras y los ministros que asisten encantados a los desfiles, todos miembros, miembras y miembres del gabinete que está dispuesto a establecer un "pajaporte" para los mayores de 18 años con el bienaventurado propósito de impedir que los menores de 18 años accedan al porno. ¿Sinsentido? Absoluto. Una cartilla de racionamiento del porno mientras tipos en pelotas enseñan sus atributos libre y literalmente en las calles de España. Por no hablar del control digital de la población, el rasgo inequívoco de las dictaduras comunistas.


Más contradicciones. El Gobierno de izquierdas sostiene que todos los españoles son iguales ante la ley hasta que es llamada a declarar la esposa del presidente investigada por presuntos delitos de corrupción en los negocios y tráfico de influencias. Entonces la igualdad se convierte en presiones, infundios y noticias falsas contra el juez difundidas por los medios afines al sanchismo y en que se intenta que no haya imágenes de la Señora deponiendo (o no) ante el magistrado. El fango, qué cosas.


Suma y sigue, la izquierda en versión nacionalista, ERC. El partido que presume de transparencia, ética y honradez organizó una campaña de falsa bandera sugiriendo que su propio candidato a la alcaldía de Barcelona, Ernest Maragall, sufría la misma enfermedad que su hermano Pasqual. ¿Cómo? Sí, el partido del beato Junqueras maquinando operaciones subterráneas para desacreditar a propios y extraños. Muy edificante.


Tan edificante como los gastos privados de sus vacaciones que el fugado Toni Comín intentó endosar al Consejo de la República organizado por Puigdemont para soportar el terrible "exilio". Comín, que antes de Junts estuvo en ERC y aún antes en el PSC, quería que el pueblo catalán que contribuye con sus dineritos a la causa republicana le pagaran a él y a su amiguete Lluís Llach el alquiler de un velero en la Costa Azul.


Y así ad nauseam.


El juez Aguirre declara no amnistiable la organización criminal de Puigdemont para traicionar a España con Rusia

En un auto, que avanza LD, el juez Aguirre señala que "la presunta malversación se realizó como medio para la comisión del delito de traición".

Miguel Ángel Pérez. libertad digital. 9 Julio 2024


El titular del Juzgado de Instrucción nº 1 de Barcelona, Joaquín Aguirre, ha declarado no amnistiable la organización criminal liderada por el expresidente catalán fugado Carles Puigdemont para traicionar a España y a la UE con la Rusia de Vladimir Putin.


El instructor abría el pasado 21 de junio una pieza separada sobre la injerencia rusa en el proceso independentista catalán en el marco del ‘caso Voloh’. En este nuevo procedimiento se investigaba inicialmente por presuntos delitos de traición y malversación a Puigdemont; su abogado Gonzalo Boye; su director de oficina Josep Lluís Alay; el expresidente catalán Artur Mas; la exdiputada de Junts Elsa Artadi y otras 8 personas.


En un auto de 39 páginas, al que ha tenido acceso Libertad Digital, el juez Aguirre hace referencia a los delitos de traición, malversación investigados y añade el de organización criminal: "La amenaza rusa a los valores democráticos de la Unión Europea no está centrada exclusivamente en Catalunya, sino que afecta a otros países como son: Alemania, Francia, Italia, Letonia. Por tanto, este Magistrado considera que sí hubo una amenaza (en el sentido de "peligro") real y efectiva de que una potencia extranjera (Rusia) ejecutara actos perjudiciales para la integridad territorial de España".


"Enmarcado en un inédito, desde el punto de vista de la Historia, proceso revolucionario de las élites, y una vez que se conoció la llamada sentencia del procés, se produjeron en octubre del 2019, en todas las provincias de Cataluña, aunque con epicentro en Barcelona, un clima sedicioso e insurrecto alentado por las propias élites políticas que, a través de un organizado y coordinado plan ejecutado por sus mandos intermedios, vehicularon a las masas que, utilizadas como ariete revolucionario, llevaron a la comunidad autónoma al caos durante la semana en la que se conoció la sentencia", añade.


"No solamente se produjeron cortes de carreteras y vías ferroviarias en Cataluña en un genuino proceso de revuelta y desobediencia civil violenta, desde luego no pacífica, sino que una de las principales infraestructuras críticas, como es el Aeropuerto de Barcelona-El Prat fue colapsado por miles de manifestantes independentistas, provocando la cancelación de más de un centenar de vuelos, con importantes daños materiales, descrédito internacional de España ante el mundo (uno de los objetivos buscados) y numerosos heridos, la mayor parte de ellos policías, sin olvidar al ciudadano francés fallecido al que, la situación de estrés generada por la revuelta y la posible pérdida de vuelo, unida a su enfermedad coronaria de base, al menos dificultaron que, una vez se desencadenó el proceso cardiaco, el auxilio pudiera llegar a tiempo", resalta el auto.


Según el juez Aguirre, "si hubo tanto una amenaza efectiva y real como un uso efectivo de la fuerza en los hechos indiciariamente probados en que una potencia extranjera ejecutara actos perjudiciales y contra la integridad territorial o la independencia política de España, el delito perseguido en las presentes diligencias previas de traición del Título XXIII, Libro II del Código Penal, no está incluido en las exclusiones de la LO 1/2024 y, por tanto, no es amnistiable".


Respecto a la malversación y la organización criminal

En el mismo auto, el juez Joaquín Aguirre señala que "la presunta malversación se realizó como medio para la comisión del delito de traición. En caso de que la traición hubiera triunfado se habría producido la secesión de una parte del territorio nacional de tal manera que, como dice el Tribunal Supremo ‘… habría afectado, aunque lo fuera en grado de mera tentativa, a la Renta Nacional Bruta Estatal y, por ende, al presupuesto comunitario’".


"Dado que el artículo 2 e) excluye del ámbito objetivo de la LO 1/2024 los actos tipificados como delitos que afectaran a los intereses financieros de la Unión Europea, debemos considerar que los delitos de malversación cometidos en concurso medial con la traición no están amparados por la LO 1/2024, al perjudicar los intereses financieros de la Unión Europea, puesto que la suma que España aportaría a los presupuestos generales de la Unión Europea habría sido inferior, con lo que los intereses financieros de la Unión hubieran quedado afectados", afirma el auto.


El instructor mantiene además que "la organización criminal de la que formarían parte, de una u otra forma, los investigados se habría iniciado en el 2010 con el nombramiento de Artur mas como presidente de la Generalitat de Catalunya (GenCat)".


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