Recortes de Prensa Domingo 12 Enero 2025


La Inteligencia de Corea del Sur confirma que Ucrania ha capturado a dos soldados norcoreanos
Carlos Garcés. Madrid. el mundo. 12 Enero 2025

Continúan las confirmaciones de que Corea del Norte ha envíado más de 10.000 soldados a la guerra de Ucrania. Este sábado, Kiev anunció que ha capturado a dos soldados del país asiático y que está interrogándolos, algo que ha confirmado este domingo la Inteligencia surcoreana.


Ucrania calcula que entre 10.000 y 12.000 soldados norcoreanos han sido enviados a Rusia. La Casa Blanca y el Pentágono confirmaron el mes pasado que las fuerzas norcoreanas han combatido en posiciones principalmente de infantería. Han luchado con unidades rusas y, en algunos casos, de manera independiente alrededor de Kursk.


En Kursk, el contraataque de Moscú ha superado y desmoralizado a las fuerzas ucranianas, ha dejado miles de muertos y heridos, y ha recuperado más de 40% de los 984 kilómetros cuadrados que Ucrania había tomado.


En su invasión total de Ucrania, iniciada hace tres años, Rusia ha capturado la quinta parte del territorio ucraniano, y Zelenski ya indicado que espera que el control de Kursk contribuya a obligar a Moscú a negociar el fin de la guerra. Sin embargo, varios funcionarios ucranianos y occidentales temen que apostar a Kursk debilite todo el frente de batalla, de 1.000 kilómetros, mientras Ucrania pierde un muy valioso terreno en el este.


9:15

Las tropas norcoreanas en Ucrania ganan experiencia en el campo de batalla

Durante semanas, las tropas ucranianas se prepararon para enfrentarse a un enemigo desconocido: los soldados norcoreanos enviados para reforzar las fuerzas de Moscú después de que Ucrania lanzó una incursión ultrarrápida y se apoderó de territorio en la región rusa de Kursk durante el verano, informa AP.


Su llegada marcó una fase nueva y alarmante en la guerra. Y aunque inicialmente no tenían experiencia en el campo de batalla, las tropas norcoreanas se han adaptado rápidamente, un desarrollo que podría tener consecuencias de largo alcance a medida que adquieran conocimientos de combate en la guerra contra Ucrania.


A diferencia de las tropas rusas con las que Ucrania ha estado luchando durante casi tres años, las fuerzas de Kiev no estaban seguras de qué esperar de este nuevo adversario, arrastrado a la guerra después de que Moscú y Pyongyang firmaron un acuerdo en el que prometían asistencia militar utilizando "todos los medios" si alguno de ellos era atacado.


8:22

La fuerza aérea ucraniana dice que derribó 60 drones rusos lanzados durante la noche

Las defensas aéreas ucranianas derribaron 60 de los 94 drones lanzados por Rusia durante la noche, dijo el domingo la fuerza aérea, informa Reuters.


Agregó que 34 drones se "perdieron", en referencia al uso de guerra electrónica por parte de Ucrania para redirigir los drones rusos.


7:30

Rusia dice que ha conquistado un asentamiento cerca de la ciudad clave de Pokrovsk

El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que el ejército había ganado el control del asentamiento de Shevchenko, cerca del centro logístico de Pokrovsk, un objetivo ruso clave en su avance a través de la región oriental ucraniana de Donetsk, informa Reuters.


El ejército de Ucrania no hizo mención del pueblo en su último relato de la actividad en primera línea, pero dijo que Rusia había lanzado más de 50 ataques contra las posiciones de sus fuerzas cerca de Pokrovsk en las últimas 24 horas.


El informe militar ruso dijo que la "acción decisiva" de sus fuerzas había culminado en la captura de Shevchenko, que se encuentra a unos 3 kilómetros al oeste de Pokrovsk.


Zelenski pone a máximo rendimiento la máquina de fabricar drones
Lucía Gutiérrez. la razon. 12 Enero 2025

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha dado la orden de alcanzar cuanto antes el récord de producción de drones para su ejército, con el objetivo de incrementar los ataques a objetivos rusos tanto en suelo ucraniano como en territorio enemigo.


La instrucción incluye además aumentar la producción de “todo tipo de drones”, con el objetivo implícito de reducir la dependencia de la industria militar ucraniana de las entregas de material de sus socios, una vía siempre inestable y que es una fuente de preocupaciones para Kiev.


Hace poco más de un mes, de hecho, el presidente ucraniano anunció que la industria militar nacional está “acelerando la producción” propia de misiles después de recibir los informes satisfactorios de sus ingenieros.


En el mes de octubre, el ministro de Defensa ucraniano, Rustem Umérov, había afirmado que Ucrania tiene como prioridad el desarrollo y la producción de drones de largo alcance y misiles balísticos, y que se estaban probando cuatro nuevos tipos de estos proyectiles.


Ahora el foco se pone en la fabricación de drones, un elemento fundamental tanto en la defensa antiaérea (todas las noches estos aparatos deben emplearse a fondo para frenar los ataques aéreos rusos) como en el ataque selectivo contra objetivos rusos.


La emboscada a uno de los jefes militares de Zaporiya, hace tan solo unos meses, es un buen ejemplo de ello.


"Es una tarea conjunta de los fabricantes de armas, los funcionarios de nuestro Gobierno y todos los involucrados: hacer de este año un año récord en términos de todo tipo de drones, así como aumentar significativamente la producción de misiles ucranianos, artillería y todo el equipo necesario", ha explicado el mandatario en su videomensaje vespertino diario recogido por Europa Press.


De hecho, Zelenski ha afirmado que ya ha dado "instrucciones para aumentar el número de pedidos de drones", alegando que sus arsenales son "una de las garantías de (su) independencia", del mismo modo que "lo es la precisión de (sus) guerreros".


El líder del Ejecutivo ha celebrado asimismo las últimas muestras de respaldo internacional, agradeciendo a sus socios el "buen ataque con sanciones" que han llevado a cabo esta semana.


En concreto, Zelenski ha aplaudido las sanciones estadounidenses contra el sector petrolero ruso, especialmente "contra la flota de petroleros en la sombra y contra empresas como Surgutneftegaz, que es el bolsillo personal de Putin"; así como "las presiones a la industria nuclear rusa por seguir manteniendo como rehén (su) planta nuclear de Zaporiya".


En la misma línea, ha alabado las nuevas medidas de sanciones anunciadas por Reino Unido "para limitar los ingresos de energía de Moscú" y el "nuevo paquete de sanciones de Japón contra la producción de armas rusa", que "restringe el suministro de componentes y algunos programas importantes que apoyan la producción de armas de Rusia".


La cifra a la que nadie mira: España emitirá este año casi 280.000 millones de deuda y no pasa nada
Domingo Soriano. libertad digital. 12 Enero 2025


El Tesoro Público presentó hace unos días su Estrategia de Financiación para 2025. El documento ha pasado bastante desapercibido.


El Tesoro Público español emitirá este año 278.448 millones. E intentará colocarlos en los mercados financieros al menor coste posible.


No lo decimos nosotros. Ni es el pronóstico de un periodista catastrofista o con ganas de meter el dedo en el ojo a Carlos Cuerpo. Es la cifra oficial que anunciaba el Ministerio de Economía hace sólo unos días. Como cada enero, el Tesoro publicaba su Estrategia de Financiación para 2025 (aquí, el documento). Y casi como cada año, el anuncio ha pasado bastante desapercibido. No fue así entre 2010 y 2015. En aquel momento, sobre todo en el período 2010-2012, cada movimiento del Tesoro, cada emisión de deuda, cada cambio en la prima de riesgo, se miraba con lupa. Había dudas acerca de la capacidad del Estado español para financiarse y pocas cifras importaban más.


Ahora ya no. En Libre Mercado sí creemos que es relevante. De hecho, en opinión de este columnista, es el documento más importante del año. Pero estamos bastante solos en esto. Teniendo detrás al primo de Zumosol del Banco Central Europeo, quién se va a preocupar del coste de la financiación o de si en quince días tenemos la primera emisión de bonos. Si, además, se colocan todos sin mayores problemas.


Quizás por eso, el otro día el ministro de Economía presumía tras el Consejo de Ministros. El titular de la nota de prensa oficial decía "El Tesoro sitúa en 60.000 millones las necesidades de financiación en 2025, con flexibilidad para la reconstrucción y el relanzamiento de la zona afectada por la DANA". ¿60.000 millones? Nada, apenas minucias.


Iniciábamos el artículo hablando de más de 278.000 millones, pero Economía sólo destaca 60.000. ¿Y el resto? Eso es la refinanciación. Es decir, el Tesoro emitirá en total 278.448 millones. Esa es la cifra real de letras y bonos que se llevarán al mercado. Pero 218.448 millones en realidad corresponden a refinanciaciones: esto es, deuda que vence a lo largo de 2025 y que no vamos a amortizar (eso ni se plantea). Y que damos por hecho que alguien nos comprará. Patada p'alante. Por eso, porque ningún ministro hace ningún caso a las refinanciaciones (ni Cuerpo ni sus antecesores lo han hecho) es por lo que se habla sólo de los 60.000 millones, que es la nueva deuda, la que corresponde al déficit del ejercicio en el que entramos.


Las preguntas

Algunas consideraciones al respecto:


1 – Esos 278.448 millones suponen un récord de emisiones. Al menos en términos nominales, aunque no en relación con el PIB, que es lo único que importa al Gobierno. Nunca antes el Estado español emitió más deuda en un solo ejercicio (o, lo que es lo mismo, nunca antes necesitamos a más compradores dispuestos a adquirir nuestros bonos y letras).


2 – En cuanto al peligro potencial, no estamos mucho mejor ahora que en 2012. Al menos en lo que respecta a lo que nosotros podíamos hacer. El optimismo de Cuerpo, como el de los ministros que le precedieron en la última década, se basa en una realidad objetiva: las emisiones de deuda son ahora eventos mucho más tranquilos que en 2012. Ya no hay dudas sobre si colocaremos o no las letras y bonos. Y el coste puede variar algo al alza o a la baja en función de la política de tipos del BCE, pero en ningún caso el cambio será dramático en el corto plazo.


Todo esto es cierto. Como también lo es que nada de esto se debe a que España haya mejorado sustancialmente su posición. Lo que ha ocurrido es que el BCE (que es como decir el resto de miembros de la Eurozona) nos apoya. Eso fue lo que cambió tras las famosas palabras de Mario Draghi en el verano de 2012 (el ya mítico "whatever it takes"). Y al decir que el BCE nos apoya, lo que queremos decir es que lo hacen el resto de países de la Eurozona.


Pero, ¿y si dejaran de apoyarnos? Me dirán que eso no va a ocurrir. Ni siquiera hablamos de un riesgo real de ruptura de la Eurozona (algo que, por otro lado, puede plantearse en cualquier momento). Sólo con que se incrementen un poco las tensiones en el club de la moneda única, ya tendríamos problemas. Imagínense que el coste de las emisiones de deuda nueva sube 40-50 puntos básicos. ¿Cuánto supondría eso para un país que tiene que colocar casi 280.000 millones este año?


De nuevo, seguro que el ministro Cuerpo pondría cara de hastío si leyera esto. Ese mohín de "no nos pongamos catastrofistas, si The Economist acaba de decirnos que somos la economía que mejor lo hace". Aquí el problema es que, en términos talebianos (de Nassim Nicholas Taleb, el tipo que mejor explica los riesgos en el mundo), estamos en una situación extremadamente frágil. No controlamos nuestro destino, como no lo hace ningún agente muy endeudado y que necesita refinanciarse constantemente. Por muy bien que te vayan las cosas, siempre estás en las manos del que te tiene que prestar el dinero una y otra vez. ¿Lo normal es que no pase nada? Hasta que pasa. En unas semanas, por ejemplo, hay elecciones en Alemania y todas las encuestas anticipan un resultado histórico de los euroescépticos. Se me ocurren unos cuantos escenarios en los que las cosas se complican mucho para España. Ni siquiera tiene por qué haber un cambio radical de política por parte del BCE, un par de declaraciones agresivas del nuevo ministro de finanzas germano contra los países del Sur... y estás metido en un lío.


3 – ¿Quién tiene nuestra deuda? Con nombre y apellidos no lo sabemos. Pero según las estadísticas que maneja el Tesoro, el 44,1% son no residentes (sobre todo, grandes fondos extranjeros de renta fija; ahora celebramos que acudan a las rondas de financiación pero, si vuelve la crisis, pasarán a ser de nuevo especuladores sin escrúpulos que aprietan la soga); el 27,4% está en manos del Banco de España (que es quien ejecuta en nuestro país la política del BCE); y el resto, 28,5%, de residentes (de nuevo, sobre todo, sector financiero y grandes fondos).


El Tesoro está encantado porque ese 27,4% en manos del Banco de España supone una reducción sustancial respecto al 33,4% de 2022. Es la nueva política del BCE: ir soltando lastre poco a poco. Pero esto hace que (1) si se complican las cosas en los mercados financieros, se supone que ese respaldo del BCE ya no será como el de los últimos años, en los que el coste de financiación bajaba entre otras cosas porque todo el mundo sabía que siempre estaban Papá Draghi y Mamá Lagarde para comprar lo que sobrase; y (2) estamos hablando de una cifra (27%) que sigue siendo muy elevada. Hasta la crisis de 2010-12, la tenencia de deuda pública por parte del Banco de España (BCE) era testimonial. De nuevo, la fragilidad y la dependencia de otros (en este caso, nuestros socios de la Eurozona).


4 – Por último, la gran pregunta: ¿de qué nos sirve, en lo realmente importante, todo ese crecimiento del que presume el Gobierno?


Esto es lo más grave de todas las cifras conocidas esta semana. Desde 2015, España está creciendo. Es verdad que la situación del español medio no es para tirar cohetes (las cifras per cápita no son nada buenas, por muchos vídeos promocionales que publique Cuerpo), pero no lo es menos que el PIB sí está creciendo y más aún en términos nominales. También es cierto que tuvimos el paréntesis del covid. Y, por último, es innegable que la inflación le ha venido de perlas al Gobierno, que ha visto como el peso de la deuda respecto al PIB se ha reducido sin que haya tenido que hacer ningún esfuerzo.


Pero, incluso así, cabe preguntarse cómo podemos haber perdido la oportunidad de recomponer de verdad nuestras finanzas públicas. Porque hemos despilfarrado y lo seguimos haciendo con constancia y determinación. ¿60.000 millones de nuevas emisiones netas? Y lo anunciamos como si fuera una gran noticia. Somos adictos al déficit y al gasto. Qué más da mientras nos refinancien y el coste de la deuda siga controlado, pensarán algunos. Otros miramos a todo el dinero que cada año se va sólo en pagar intereses (más de 40.000 millones al año) y nos preguntamos qué pasará el día que cambie la situación en el mercado.


No estamos haciendo los deberes y lo hemos confiado todo en la suerte y en lo que decidan otros. Por ahora, nos hemos ido salvando. Por eso, el año que viene volveremos a otro récord de emisiones. Y nadie le hará caso a la Estrategia de Financiación del Tesoro. Si lo estamos colocando todo sin problemas, ¿no?


Los tiempos están cambiando
Jesús Cacho. Vozpópuli. 12 Enero 2025

Clasificada como canción protesta, The Times They are a-Changin, uno de esos himnos que marcaron nuestra juventud y la de millones de personas en todo el mundo, ha sido considerada siempre como un reflejo de lo que se ha dado en llamar “brecha generacional”. Su autor, el laureado Bob Dylan, se encargó sin embargo de aclarar a poco de lanzarla, primeros de los sesenta, que no se trataba de una declaración, sino de un “sentimiento”. A poco más de una semana de la vuelta de Donald Trump al Despacho Oval, el sentimiento de que los tiempos están cambiando recorre el mundo de una punta a otra. Para unos, como una manifestación de entusiasmo exacerbado; para otros, con una sensación de pánico atroz. Porque, el hombre más poderoso del mundo a partir del próximo lunes 20 de enero, no llega solo, que, a diferencia de lo ocurrido en 2016, viene esta vez acompañado por el hombre más rico del mundo, un campeón tecnológico que a su colosal fortuna une los 212 millones de seguidores que comparten la red social X, y que parece haber descubierto una inusitada pasión por la geopolítica, asunto que trae de cabeza a los líderes mundiales y que, en el caso de los de la Unión Europea, produce escalofríos.


Estamos ante un cambio de dimensión histórica. Aclarémonos. Quienes peinamos canas estamos obligados a ser precavidos y no por precaución sino por experiencia. Es demasiado pronto para sacar conclusiones de lo que se avecina, son demasiado evidentes las incógnitas. Las apelaciones a la ocupación de Canadá, Groenlandia y Panamá no pueden interpretarse literalmente (“simplificación excesiva” como aquí escribía el viernes Víctor González Coello de Portugal, uno de los españoles mejor relacionados con el Partido Repúblicano, para quien “no hay que escuchar lo que dice Trump, sino lo que quiere”), so pena de tener que condenar la idea por inaceptable y disparatada. Por imperialista. No menor intranquilidad produce su cercanía a acreditados tiranos tipo Vladímir Putin, por no hablar del riesgo que para el comercio internacional y el crecimiento implicaría su disruptiva política arancelaria. Alguien ha aludido a la “teoría del caos”, sistemas cuyo comportamiento desordenado es casi imposible de predecir pero capaces al tiempo de provocar creatividad e innovación, al hablar de la relación de un político atrabiliario como Trump con un tipo cuyas habilidades como empresario tecnológico están más que demostradas pero cuyas virtudes como político son una peligrosa incógnita. Ello sin olvidar la demostrada capacidad de Trump para despedir amigos a la misma velocidad que los contrata. Acuerdense de Steve Bannon.


Las cosas, en efecto, están cambiando. El mundo está a punto de experimentar una mutación histórica. Una “ola global de revisionismo derechista”, decía ayer el diario sanchista de la mañana. Cambio político monumental en Washington, que recuerda el vivido en los ochenta cuando Ronald Reagan asumió la presidencia con la promesa de revitalizar la economía y devolver a América su esplendor. En realidad ya han cambiado. Elon Musk se enorgullece estos días de haber acabado con ese wokismo que tanto daño ha hecho a Estados Unidos y al resto del antaño llamado “mundo libre”. Quien se bate en retirada es la izquierda neomarxista (el comunismo de siempre, para qué engañarnos, travestido de ecofemismo, racialismo y demás ismos al uso) y el consenso socialdemócrata que ha gobernado Europa desde el final de la II Guerra Mundial y que ahora se ha hecho fuerte, infectado por el virus woke, en la burocracia de Bruselas. Es el péndulo libertario dispuesto a acabar con la pesadilla que para las libertades ha supuesto el colectivismo (comunitarismo, lo llaman piadosamente algunos) disfrazado de “justicia social”, resuelto a ventilar sociedades infectadas de socialismo, acabar con el trato desigual ante la ley, los cepos a las libertades individuales, los impuestos confiscatorios, el castigo a las empresas y todo lo demás. Todo ha empezado a cambiar en Estados Unidos ¡y a qué velocidad! Aferrados a las faldas del Partido Demócrata y fervientes opositores de Trump durante su primer mandato, el resto de multimillonarios tecnológicos –Mark Zuckerberg, Jeff Bezos (y su Washington Post), Tim Cook– han cambiado de acera rápidamente y ahora se alinean uno tras otro con el 47 presidente de los USA y su nuevo gurú, el “tío Elon” como se le conoce en Mar-a-Lago. Particularmente escandaloso el golpe de timón protagonizado por Zuckerberg y su Meta esta semana. El dinero, que no la poesía.


La apisonadora libertaria mantiene acollonada a esa cofradía de mediocres, a menudo también malvados, personajes que controlan la política europea. Por ejemplo, al primer ministro británico, el socialista Keir Starmer (Keir Starmtrooper, como lo denomina Musk). El dueño de Tesla y SpaceX ha prestado un gran servicio a la Justicia, siquiera retrospectiva, al sacar a la luz la tragedia vivida por miles, se habla de hasta 20.000, jóvenes británicas de humilde condición víctimas de bandas de violadores formadas en su mayoría por paquistaníes, bandas que funcionaron durante más de una década sin ninguna reacción real por parte de las autoridades, temerosas de ser acusadas de racismo y de perjudicar el mantra del “multiculturalismo” impuesto por las elites globalistas. La responsabilidad en lo ocurrido de Starmer, para quien investigar esas violaciones es “subirse al tren de la extrema derecha”, es excepcional habida cuenta de su condición, a partir de julio 2008, de jefe de la Fiscalía de la Corona (CPS) y director del Ministerio Público, obligado como estaba a utilizar a la policía en la apertura de líneas de investigación y decidir sobre los cargos a presentar contra los malhechores. Como explicaba aquí Irene González el miércoles, “es el sacrificio de miles de niñas europeas vulnerables en el altar de la multiculturalidad por un puñado de votos”. Es la constatación de que la seguridad (y, en el fondo, la libertad) de las mujeres es el precio a pagar por la búsqueda de esa aventura multicultural. Los movimientos feministas europeos no han dicho esta boca es mía sobre “uno de los escándalos más repugnantes ocurridos en Gran Bretaña” (Allison Pearson en The Telegraph), y lo mismo cabe decir de los españoles. El diario El País (Bueno, Pepa, muévete, cariño!), tan proclive siempre a manosear el tocamiento del cura del pueblo al monaguillo o del fraile al seminarista, guarda sepulcral silencio.


Mucho más preocupados están en Bruselas y alrededores con el apoyo prestado por Musk a Alice Weidel, la líder de Alternativa para Alemania (AfD). Para los eurócratas, se trata de una intolerable intromisión en la política europea. Nunca les ha preocupado la responsabilidad de los Soros, Gates, Schwab y demás millonarios filántropos de izquierdas en ese cáncer, por ellos auspiciado, en que se ha convertido la inmigracion musulmana en Europa y los problemas de inseguridad provocados en nombre de un multiculturalismo imposible. No les ha preocupado los miles de millones invertidos por esos abanderados de la ingeniería social en el viejo continente. Según una investigación llevada a cabo por The Times, publicada el 20 de diciembre, Londres se ha convertido en la capital europea de la Sharia. Hasta 85 “tribunales de la Sharia” regulan actualmente matrimonios –algunos polígamos–, divorcios o herencias en Gran Bretaña, creando un sistema de justicia “privatizado” que penaliza a las mujeres a espaldas de la justicia del Estado. George Soros fue el primer personaje al que recibió Sánchez en junio 2018 nada más poner sus posaderas en Moncloa. Lo ha aclarado este jueves Giorgia Meloni con la contundencia que le caracteriza: “Musk ha financiado con luz y taquígrafos la campaña electoral de su candidato, algo bastante común en Estados Unidos. Pero hasta donde yo sé, no financia partidos, asociaciones o políticos en el resto del mundo, que es lo que hace Soros, por ejemplo, y eso sí es una intromisión inaceptable en la soberanía de los Estados. ¿El problema es que Musk tiene influencia y es rico, o el problema es que no es de izquierdas?”.


Para Europa, la llegada de Trump a la Casa Blanca y su alter ego es un caso de “susto o muerte”. “El panorama político es un campo de ruinas”, aseguraba ayer mismo Gabriel Attal, actual presidente del grupo Ensemble pour la République (EPR) en la Asamblea Nacional a Le Figaro, “que deja pocas esperanzas de grandes reformas y avances. El objetivo de los próximos meses para Francia, dada nuestra situación política y económica, no es tanto hacer una revolución como salvar lo que aún pueda salvarse”. En el mismo ambiente derrotista se manifestaba hace días el ministro para Asuntos Europeos del nuevo Gobierno Bayrou, para quien “Europa corre el riesgo de ser borrada pura y simplemente”. Según Benjamin Haddad, “queríamos convencernos de que la elección de Trump en 2016 fue solo un accidente, pero ahora vemos que la transformación es estructural. Esto no significa que debamos abandonar nuestro modelo y volvernos como los demás. Pero para defenderlo debemos comprender las nuevas reglas”. Erre que erre, las elites europeas siguen sin asumir que no se trata de defender un modelo que hace agua, sino de cambiarlo para mejorarlo. Transformarlo -democratizarlo, desburocratizarlo- para hacerlo competitivo y, sobre todo, para mejorar la vida de los ciudadanos europeos, no para amargársela. Más peligrosa aún es la tentación totalitaria que asoma por la mente de ciertos “notables” del continente. Lo explicaba ayer el europarlamentario Hermann Tertsch: “El ex comisario Thierry Breton amenaza con que la UE anulará todas las elecciones que se produzcan en países europeos cuyos resultados considere fruto de interferencias externas. «Lo hicimos en Rumanía y obviamente lo haremos en Alemania si es necesario»”. Breton, que también amaga con censurar o prohibir la red X de Musk en Europa, “viene a decir que la CE anulará, con el argumento, justificación o pretexto de injerencias extranjeras, todas aquellas elecciones cuyos resultados no satisfagan ideológicamente a Bruselas”.


Una amenaza que apunta directamente a España. Empezamos a entender por qué Sánchez tiene tantos amigos en Bruselas. Y por qué Bruselas ha dejado de ser una salvaguardia, como tantas veces imaginamos tantos, para la supervivencia de la democracia en España, un país que se desliza aceleradamente hacia el modelo bolivariano que Maduro representa en Venezuela. Lo decía esta semana García-Margallo, entrevistado en Vozpópuli por Gabriel Sanz: “Sánchez se parece cada día más a Maduro”. Incluso físicamente. El panorama de un mundo ganado para la causa libertaria, con la negra excepción de una España convertida en pata europea de las dictaduras latinoamericanas, no puede resultar más desalentador. A través del diario dependiente de la mañana, Sánchez ha acusado a Musk (sin nombrarlo, que nuestro gañán es cobardón) de "atacar nuestras instituciones, difundir el odio y apoyar a los nazis". Ayer mismo manifestaba, a través del mismo panfleto, lo que piensa de Trump: “el presidente convicto de Estados Unidos”. La respuesta de la capital del imperio ha consistido en nombrar como embajador en Madrid a Benjamín León Jr., un empresario cubanoamericano, declarado anticomunista, en un claro mensaje a Sánchez y su política exterior proclive a regímenes autoritarios tipo Cuba, Venezuela o Nicaragua. Sánchez, un peligro para las libertades democráticas, está en la lista de los enemigos de Estados Unidos. También en la de Israel. Su final está cada día más cerca. Pero lo echaremos los españoles. Sin la menor duda. Lo sabe tan bien que cada uno de los movimientos que a la desesperada se ve obligado a emprender para evitar la cárcel -la suya y la de su señora-, tal que esa abracadabrante “Proposición de Ley de Garantía y Protección de los Derechos Fundamentales frente al acoso derivado de acciones judiciales abusivas” anunciada esta semana, no hacen sino acercarle a esa meta. Su hora está próxima.


Paseando a Franco por el mundo
Editorial ABC. 12 Enero 2025

En la campaña de conmemoración por el cincuenta aniversario del fallecimiento de Francisco Franco, el Gobierno de Sánchez ha incluido una selectiva proyección internacional. Con la misma indeterminación del resto del centenar de actos anunciados para 2025 en España, determinadas embajadas acogerán eventos supuestamente dirigidos a celebrar el medio siglo de «España en libertad», que es la contraseña elegida por el Ejecutivo para activar lo que realmente es una campaña preelectoral del PSOE y una reivindicación de Pedro Sánchez en sus peores momentos. El sanchismo ha encomendado al Instituto Cervantes que se sume a la viralización por todas sus sedes en el mundo de esta estrategia manipuladora y sectaria. Además, las embajadas seleccionadas, por el momento, son las de Argel, Washington, París y Berlín. Las razones de esta selección son desconocidas, aunque tienen todas ellas en común que cuentan con embajadores de confianza estricta del Gobierno socialista, que se asegura así un cumplimiento sin matices de las consignas de La Moncloa.


La falta de criterio conocido en la selección de estas embajadas se une a la opacidad con la que se está planificando este año de 'heroica' militancia socialista contra el cadáver de Franco. En el real decreto que creó la figura del Comisionado para la celebración de estos fastos –cargo ocupado por una profesora dedicada a estudiar el cine antifranquista, con una vasta trayectoria digital de insultos a la Corona, la Policía y las Cortes– no aparece mencionada ninguna actividad en el exterior. Así que habrá que esperar a que la comisionada o Exteriores hagan público el programa de actos y se vea qué relación guarda la muerte de Franco con los países donde se encuentran estas legaciones.


Este plan de activismo retrospectivo de Sánchez se basa en una simple improvisación, que irá concretándose en función de las necesidades políticas del líder socialista, como se vio en el acto de presentación de la campaña. El problema de involucrar a embajadas en un falso programa institucional de exaltación de la libertad es que supone utilizar el cuerpo diplomático para intereses que no son de Estado. Nada indica que la conmemoración del 50 aniversario de la muerte de Franco se vincule, más allá de la palabrería oficialista, al consenso de la Transición y al papel protagonista de la Corona, encarnada intachablemente, en los difíciles años que median entre 1975 y 1978, por Don Juan Carlos y continuada de forma ejemplar por Felipe VI.


Los embajadores representan a España y defienden sus intereses nacionales. Por supuesto, sus funciones representativas en el Estado ante el que están acreditados pueden comprender numerosas actividades de todo tipo, culturales, económicas, sociales e históricas. Se entendería muy bien, por ejemplo, que embajadas en Iberoamérica acogieran exposiciones sobre el legado español en el continente, ahora que es objeto de una manipulación ideológica por la izquierda populista en el gobierno de determinados países. La utilización de las instituciones del Estado en esta campaña del Ejecutivo es un ejemplo de manipulación disfrazada de buenas intenciones. En su discurso durante el acto inaugural, Sánchez quitó el velo a la propaganda oficial y puso letra partidista a la música pretendidamente institucional, presentándose como adalid del progresismo y muro de contención de la ultraderecha. Incluso se buscó un icono de su salvífica misión en Musk, pese a que tenía a mano a Maduro, representante de todo lo contrario a esa libertad en España con la que Sánchez se encontró hace cincuenta años, gracias a quienes hoy no se reconocen en su campaña de resurrección del franquismo.


SEGÚN UN INFORME DE NEOS

El exceso de inmigración representa un gasto anual para el Estado superior a los 30.000 millones de euros
LGI. gaceta. 12 Enero 2025

Un estudio reciente, titulado Inmigración en España: buenismo o eficacia, elaborado por el grupo de trabajo de Amenazas Globales de NEOS, analiza las consecuencias económicas, sociales y culturales del fenómeno migratorio en España. Liderado por expertos como Jaime Mayor Oreja, Luis Zayas y Alejandro Macarrón, el informe detalla que el exceso de inmigración representa un gasto anual para el Estado superior a los 30.000 millones de euros.


El informe atribuye este elevado coste a la presencia de 1,4 millones de inmigrantes desempleados y aproximadamente dos millones de familiares dependientes, que, aunque no trabajan, se benefician de prestaciones públicas y servicios gratuitos. Según los cálculos del grupo, si cada uno de ellos consume recursos equivalentes al 50% del PIB per cápita, el impacto económico se traduce en unos 30.000 millones de euros anuales.


Además, los autores destacan que la competencia laboral entre españoles y extranjeros aumenta el desempleo en los sectores donde hay abundante mano de obra, lo que repercute en una mayor carga económica para el Estado y un riesgo de erosión salarial para los trabajadores en general.


La población de origen extranjero en España alcanzó en octubre de 2024 los 9,2 millones, representando más del 22% de la población total al sumar los más de dos millones de hijos de inmigrantes nacidos en el país. Este crecimiento, advierten los expertos, exige una revisión del modelo migratorio para adaptarlo a una capacidad real de integración, especialmente en comunidades con menores afinidades culturales y religiosas.


Aunque la inmigración iberoamericana y europea, que representan el 47% y el 28% respectivamente, ha mostrado cierto nivel de integración, el informe señala que las altas tasas de desempleo entre estas comunidades han generado un impacto económico negativo. Paralelamente, las encuestas del CIS revelan que la inmigración es percibida como uno de los problemas más graves por una parte significativa de los españoles.


El grupo de trabajo de NEOS critica la falta de estrategias eficaces en las políticas de inmigración. Según el informe, el modelo actual, caracterizado por regularizaciones masivas y tolerancia hacia la ilegalidad, pone en peligro la sostenibilidad del estado de bienestar. En su lugar, proponen una gestión activa y estratégica que priorice una inmigración regular y seleccionada.


Los expertos también cuestionan el uso de la inmigración como solución a la baja natalidad española. Aunque puede aliviar temporalmente el déficit demográfico, no aborda las causas subyacentes y puede generar tensiones culturales y sociales.


El informe concluye que la gestión migratoria en España, especialmente desde 2008, ha sido ineficiente, perjudicando tanto al estado de bienestar como a la cohesión social. NEOS enviará estas recomendaciones a todos los partidos políticos con el objetivo de promover un debate abierto y cambios estructurales en las políticas migratorias.


La Ley de Defensa de la República de Sánchez
Federico Jimenez Losantos. libertad digital. 12 Enero 2025

La ley de Sánchez es calcada a la de Azaña, promulgada para imponer la censura a los medios desafectos al régimen y a su persona.


La Ley de Defensa de Sánchez y asociados es calcada, en su propósito de impunidad para el poder de la Ley de Defensa de la II República perpetrada antes de terminar y votar la Constitución y que duró tres años de atropellos en el Bienio Rojo de Azaña. Lamentablemente, ha suscitado poca atención entre los historiadores y, en consecuencia, entre los que gustan de curiosear las cosas de España. Es común pensar que esa Ley la promulgó Azaña tras el golpe de Estado de Sanjurjo en 1932, aprovechando una asonada sin trascendencia para imponer la censura a los medios desafectos al régimen, es decir, a su persona, porque siempre se creyó el único capaz de dirigirla.


Un despotismo bipartidista y de ocasión

No es así. La Ley de marras se introdujo a martillazos en una disposición transitoria segunda mientras seguían reunidas las Cortes Constituyentes. O sea, que los que unos señores llegados al poder sin mandato popular, ya que en las urnas del 14 de febrero se dirimían sólo unas elecciones municipales, convertidas en vacío de poder tras la huida de Alfonso XIII, empezaron su tarea privando de derechos civiles básicos a los ciudadanos, para que nadie criticara el nuevo régimen, que, en lo esencial, era masónico y anticatólico, como la propia Constitución, que provocó la dimisión de Alcalá Zamora, presidente del Gobierno Provisional y la retirada de las Cortes del grupo vasco-navarro por la Ley en defensa de una República que aún no existía.


Cabe alegar que todas las revoluciones y los nuevos regímenes empiezan de forma parecida, bajo el signo de la improvisación. Cierto. Pero aquella provisionalidad en que nació la Ley de Defensa anunciaba el sectarismo patológico, típicamente masónico, que la II República iba a exhibir contra la religión y los católicos, que cinco años después acabó en guerra civil. La susodicha ley también privó de derechos básicos a la extrema izquierda obrerista, sobre todo la CNT, cuyas huelgas fueron disueltas a tiros, como en Pasajes sólo cinco semanas después de la llegada de la República, con ocho muertos y cincuenta heridos. Los derechos más básicos –expresión, reunión y asociación–quedaban prohibidos a capricho del Ejecutivo. Y la derecha, cómo no, en la ocasión el ministro del interior Miguel Maura, alfombró el proyecto de la izquierda que era claro: la discriminación, al estilo mexicano, de los católicos y la extrema izquierda. En los primeros años de la II República, entre la ley de 21 de octubre 1931 y la de 1933 de Orden Público que le derogó, la Ley fue un arma de despotismo político.


Frases de chulería dignas de cualquier Sánchez

La Ley de Defensa de la República siempre lo fue en defensa del gobierno. En dos frases puede definirse el nulo respeto que por las libertades de los demás, la Oposición política y mediática, tenían la derecha y la izquierda republicanas. Una, de Miguel Maura, hombre que, con su apellido, pasaba por garantizar el orden público, pero cuenta en su libro Así cayó Alfonso XIII que llamó a dueños y directores de periódicos para que no contasen "sesgadamente" la citada matanza de Pasajes. La censura sobre la "quema de conventos", que lo fue también de templos y otras instituciones, no nubló la conciencia de un derechista católico, que cuenta así su hazaña:


"(…) interesaba que España supiese que había un Gobierno en su sitio, con el cual no se jugaba. Ahora bien, el diario que utilice la noticia para su campaña política, o intente envenenar el ambiente con ella, será suspendido, y suspendido quedará mientras yo esté en este Ministerio. Se dieron por enterados y abandonaron mi despacho… Salvo ‘La Voz’, que en su última página daba escuetamente la noticia sin el menor comentario, los demás diarios nada publicaron del suceso."


El valor que nunca tuvo Maura para investigar la quema de templos, conventos y bibliotecas valiosísimas de colegios y otros centros católicos, lo exhibe aquí contra los periódicos, a los que amenaza de cierre y ruina. Ninguna diferencia con Sánchez y sus secuaces cuando atacan los "bulos" sobre todos los casos de corrupción de su familia, su partido y su gobierno.


Sánchez podría asumir las prohibiciones de aquella Ley, y presentar como delitos "actos de agresión a la República" como "la difusión de noticias que puedan quebrantar el crédito o perturbar la paz o el orden público" (…) "toda acción o expresión que redunde en menosprecio de las Instituciones del Estado" (…) "la apología del régimen monárquico… y el uso del emblema, insignias o distintivos alusivos". Por ejemplo, podrían serlo las fotos de los reyes en Paiporta o de Leonor subiendo al Elcano.


La izquierda obrera, distinta a los comegambas de hoy, delinquía por "la suspensión o cesación de industrias o labores de cualquier clase, sin justificación bastante" (el "bastante", a juicio del Gobierno), "las huelgas no anunciadas con ocho días de anticipación (…), declaradas por motivos que no se relacionen con las condiciones de trabajo y las que no se sometan a un procedimiento de arbitraje o conciliación". Y atención: "alteración injustificada del precio de las cosas" y "falta de celo de los funcionarios públicos en el desempeño de sus servicios". Era la ley de una dictadura. Y así la ejerció Azaña tras la "sanjurjada" cerrando el ABC y cien periódicos.


Uno de los grandes juristas de la época, Ángel Ossorio y Gallardo, que estuvo al frente de la comisión constitucional, se encontró un día en las Cortes ante el dilema de votar la disposición transitoria segunda, la de la Ley de Defensa de la República, e hizo este discurso de total actualidad:


"Se trata de un artículo adicional a la Constitución que viene sin dictamen de nadie, sin deliberación, sin conocimiento previo de la Cámara y para ser resuelto en pocos minutos. (…) No estaba yo prevenido cuando vine a la Cámara de que habría de votar medida tan excepcional como una ley de Defensa de la República que se aparta de la Constitución, que se pone sobre el Código penal. Cuando el Gobierno presentó la ley, dijo en un artículo que esta ley viviría lo que las Cortes Constituyentes… pero de pronto se nos pide que incorporemos esa ley a la Constitución como artículo adicional"


Hay que decir que Ossorio hablaba sabiendo ya el uso y abuso que el Gobierno había hecho de esa ley, y explicó por qué se negaba a votarla:


"Después del tiempo que lleva rigiendo la ley excepcional, conocidos sus efectos, vista su aplicación, digo que yo no la ratifico. (…) Votar la Constitución garantizadora de todos los derechos de los españoles y el mismo día, en su propio texto, decir que ponemos otra vez nuestra confianza en una ley excepcional de esos mismos derechos, me parece una paradoja de tal gravedad que nadie podrá aceptarla sin vacilaciones."


Por supuesto, la mayoría obedeció las órdenes de partido y se votó. Y así quedó, como fuente legal de atropellos y arbitrariedades, durante dos años.


También servía para perseguir jueces

Es probable que el eminente jurista tuviera en la memoria, entre otras, la fechoría que el ministro de Gobernación Casares Quiroga, siniestro sujeto a quien volvió a recurrir Azaña como presidente tras echar ilegalmente a Alcalá Zamora de la Presidencia de la República, perpetró contra el juez Luis Amado, al que multó con dos meses de sueldo por dejar en libertad provisional con cargos a un tipo al que en un bar pillaron con mil pesetas y una pistola. También entonces, todo se repite, protestó el Colegio de Abogados, como por la filtración de datos del novio de Ayuso. Ya presidente del Gobierno, Casares se negó a perseguir a los asesinos de Calvo Sotelo, y cuando le dijeron el 17 de julio de 1936 que "se había levantado el ejército de África", contestó: "pues yo me voy a dormir". En resumen, el proyecto de ley de Sánchez para protegerse de la Ley y amenazar a jueces y medios de comunicación no es nada nuevo. Se inserta en la rica tradición de la izquierda contra el Estado de Derecho. Pero si sale adelante, en todo o en parte, habremos vuelto a la atmósfera de 1936. Aunque es verosímil que acabase como ayer, tratemos de evitarlo hoy.


¿Qué lengua destronará al inglés?
La batalla sobre la futura lengua vehicular en el planeta está aún por decidir
Rafael del Moral. Vozpópuli. 12 Enero 2025

Las lenguas vehiculares han estado siempre al servicio de la humanidad. El inglés de hoy se alzó sobre el francés, que se propagó en el siglo XVIII y fue lengua cultural complementaria en África, el Este asiático y otros muchos enclaves de la colonización. El español en el XVI-XVII y el italiano en el XIV-XV fueron lenguas de moda impulsadas por el imperio y el renacimiento respectivamente; el árabe fue la anterior, empujada por el Islam, y antes el latín, lengua imperial, y antes el griego, lengua de los pensadores y del ejército de Alejandro Magno, y el fenicio, lengua de los comerciantes, y el sumerio, lengua de la escritura cuneiforme. Hoy son también lenguas vehiculares el español en América, el francés en África, donde también son vehiculares el hausa y el suajili, entre otras.


Necesitaríamos saber por qué estas lenguas, y no otras, se convirtieron en vehiculares, se divulgaron y fueron admiradas y aprendidas por sus contemporáneos. Solo así podríamos explicarnos la lengua del futuro. Si nos preguntamos por qué el griego, el latín y el árabe eclipsaron a otras, descubriremos que las tres viajaron en con los ejércitos macedonios, romanos e islámicos. La expansión del latín le debe mucho a Julio César, la del árabe al precepto que empuja a la guerra santa.


Es fácil ser profeta, pues nadie de nuestra generación tendrá la oportunidad de rebatir el pronóstico. Cuando puedan juzgar mi opinión, si es que alguien interesa, unos dirán que fue un errado vaticinio, y otros, incluso, podrán darle la vuelta a la predicción para explicar que no me faltaba razón.


Lo que sí deduzco, mirando al pasado, es que durante la Edad Media nadie pudo sospechar que el español, el francés, portugués o inglés habían de ser lenguas universales, y lo fueron, y lo siguen siendo. Más podrían haber apostado por el latín, o por el árabe, lenguas que quedaron atrás por diversas razones, pero no tan alejadas porque el latín se fragmentó en las lenguas románicas y el árabe vive el mismo camino y parecida dialectalización.


Durante los primeros años del siglo XX nadie pudo sospechar que, un siglo más tarde, el inglés iba a ser la lengua, en mayor o menor grado de destreza, de la cuarta parte de la humanidad con unos dos mil millones de hablantes según el British Council. Atreverse a señalar una lengua sin saber lo que va a suceder es una temeridad. Nadie sabe si de una vez se va a poner fin a las guerras, o si un hábil ejército bien dirigido va a hacerse con la mitad del planeta y hacer de la lengua de sus gobernantes la más demandada.


Vamos a dejarnos llevar por la imaginación: ¿qué lengua está capacitada para eclipsar al inglés y convertirse en el siguiente código de comunicación universal? Tenemos pocos indicios que nos permitan asegurarlo, pero si las lenguas se siguen comportando como hasta ahora, podemos decir sin tomos a equivocarnos decir que no podría ocupar el lugar ninguna de las que actualmente carecen de hablantes monolingües, que son mayoría en el mundo, como el bretón o el gallego. Tampoco aquellas que pertenecen a pueblos que necesitan otra para el desarrollo cultural, tipo sueco, polaco, húngaro, griego…


Visto así, las lenguas que cuentan o pueden contar con posibilidades de proyección en el mundo son muy pocas. En Europa, solo el inglés, francés, español, alemán, ruso, portugués e italiano. Tanto en América como el África, solo el inglés, español y portugués. Y en Asia, también el inglés y el chino.


Solemos decir que la segunda lengua del mundo en hablantes nativos es el español, y así lo indica el anuario del Instituto Cervantes, y que el chino, el hindi, el francés, el portugués y el árabe están entre las diez primeras. Sin embargo, la diferencia entre el inglés y todos los demás es enorme. Ahora mismo la única lengua preparada para el liderazgo es el inglés, que se ha acomodado en el mundo como nadie hubiera podido imaginarse.


Lo que sí parece cierto, porque así lo vemos en la historia, es que habrá una próxima lengua vehicular; que el cambio será el resultado de la decadencia del imperio anglosajón; que la lengua emergente será la utilizada por un pueblo inteligente y especialmente valeroso, de rica despensa literaria y científica, de poderoso ejército y de capacidades superiores; que esa lengua no será ninguna de las actualmente dependientes de otra y ni de hablantes ambilingües, pues caso de despegar alguna de las dos, lo haría la principal; y que en el estado actual de la humanidad no tenemos posibilidad alguna de imaginarnos lo que puede deparar el futuro.


La fuerza que viene del Oriente

Sin embargo, está sucediendo algo que nos hace reflexionar, los sorprendentes pasos tecnológicos de los chinos auspiciados por su política de recepción de tecnología a cargo de empresas de inversión extranjera, el extraordinario avance tecnológico en robótica, en energía renovable, en biotecnología, en trenes de alta velocidad (primera potencia mundial), en transporte rápido y eficiente tanto de bienes como en personas, en autopistas, que son las de mayor longitud del mundo (160,000 km, más del doble que en EE. UU.), en industria aeroespacial (el tercer país en enviar un astronauta al espacio) y líder mundial en Inteligencia artificial.


Solo le falta, y no deseamos que lo tenga, un ejército expansionista. Mientras tanto, bien podríamos concebir, y en ese sentido avanzan, un país ambilingüe con una lengua propia para el desarrollo interior y otra internacional, el inglés, que es lo que parece estar sucediendo.


******************* Sección "bilingüe" ***********************


El euskera, en colegios y hasta en los menús de 'hanburgesak': «Los hablantes locales no reconocen la lengua»
Maria Curiel. el debate. 12 Enero 2025

La imposición lingüística por parte de los partidos nacionalistas e independentistas en el País Vasco es evidente. Actualmente un 94 % de los alumnos de la región están escolarizados en centros cuya lengua vehicular es exclusivamente el euskera, relegando la lengua materna de una amplia mayoría de vascos —el español— a un lugar secundario.


Este dato contrasta radicalmente con el porcentaje de vascos que utilizan esta lengua en su realidad social. Un claro ejemplo es la ciudad de Bilbao, capital de la región, donde tan solo el 5 % de la población tiene el euskera como lengua materna, número semejante al de los que tienen otra lengua materna que no es el castellano.


A pesar de la imposición del euskera desde edades tempranas en las escuelas por parte de los líderes nacionalistas del País Vaco, esta lengua se encuentra actualmente en horas bajas. Prueba de ello es el cierre de cara al año 2025 de una escuela de vasco —denominadas euskaltegis— en Ermua (Vizcaya).


Sin embargo, el nacionalismo sigue empeñado en empapar toda la sociedad vasca del euskera, arrinconando constantemente el castellano, la lengua común de todos los españoles.


Desde la asociación en defensa del castellano Hablamos Español han publicado una imagen de un menú de un bar-restaurante en euskera en el que los nombres de los alimentos son completamente inventados. En esta carta se pueden leer nombres como plater konbinatuak (plato combinado), postreak (postre) o hanburgesak (hamburguesa).


Con una fina ironía, esta organización ha criticado que los nacionalistas apelen a una «lengua ancestral» para defender la imposición abusiva del euskera en todos los ámbitos de la vida, mientras que muchas de las palabras que utilizan son relativamente nuevas o inventadas.


«Nos siguen llegando imágenes de la lengua ancestral. Este invento es lo que enseñan en el colegio, modo inmersión obligatoria. Los hablantes que heredaron alguna de las variantes locales habladas tradicionalmente no lo reconocen», aseguran desde Hablamos Español.


Según afirmó en conversación con El Debate Ricardo Arana, profesor y exmiembro de la Comisión Permanente del Consejo Escolar del País Vasco los dirigentes «tienen que hacer caso a los datos, es decir, analizar lo que tenemos y trabajar en base a los datos, no a lo que nosotros queremos, sino a lo que nosotros tenemos, y a partir de ahí hacer las políticas».


Asimismo, advirtió ante los micrófonos de este medio que lo que «se está trabajando en base a una sociedad que no existe, ignoran la realidad del País Vasco».


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